La emigración vuelve a niveles de hace 10 años
El campo se ha convertido en los últimos años en refugio de los parados que la crisis económica ha dejado en otros sectores, principalmente en la construcción. Andalucía es la comunidad con un mayor porcentaje de ocupados en el sector primario, un 29%, muy por encima de otras regiones con clara vocación agraria, como Galicia (11%), Murcia (9%) o Castilla-León (8%). Sin embargo, ha llegado un momento en el que la agricultura andaluza ya no puede absorber más mano de obra. Y eso se ha traducido en un descenso del número de afiliados al Régimen Especial Agrario de la Seguridad, Social (Reass), qu...
El campo se ha convertido en los últimos años en refugio de los parados que la crisis económica ha dejado en otros sectores, principalmente en la construcción. Andalucía es la comunidad con un mayor porcentaje de ocupados en el sector primario, un 29%, muy por encima de otras regiones con clara vocación agraria, como Galicia (11%), Murcia (9%) o Castilla-León (8%). Sin embargo, ha llegado un momento en el que la agricultura andaluza ya no puede absorber más mano de obra. Y eso se ha traducido en un descenso del número de afiliados al Régimen Especial Agrario de la Seguridad, Social (Reass), que era a finales de agosto de 462.855 trabajadores, muy cerca ya de los niveles de enero de 2008.
Esta situación de saturación ha provocado un rebrote en la emigración agraria. Este año, unos 10.500 vendimiadores andaluces han partido hacia Francia, una cifra que no se registraba desde hace más de una década. Antes de la irrupción de la crisis, en 2008, fueron poco más de 8.000 los temporeros, que encuentran en el país galo unas condiciones económicas y sociales mucho más favorables que en las campañas agrícolas autóctonas. Así por ejemplo, mientras que los vendimiadores en Francia perciben nueve euros por hora, en España son 6,20 euros por el mismo trabajo. A todo ello, se suma que la jornada laboral en el país galo es de 35 horas semanales y que las horas extraordinarias tienen una mejora de hasta el 50% si se superan las 43. Además, los desplazados al país vecino cuentan con alojamiento y desplazamientos gratuitos.
También ha crecido el tránsito de jornaleros a las campañas interiores. Es el caso de la campaña de aceituna, donde los parados agrarios de la comunidad prácticamente han desplazado a los inmigrantes en los dos últimos años. La fresa de Huelva ha requerido este año un contingente menor de extranjeros por la presencia de jornaleros andaluces.
En los últimos 20 años, se ha perdido el 50% de la población activa agraria, pasando de 1,8 millones a unos 800.000. Uno de cada tres tiene más de 65 años.