Educación alega ahora que los alumnos tendrán más clases

Para contrarrestar las críticas de sindicatos y profesores, la Xunta esgrimió ayer una curiosa teoría acerca de la reorganización de horarios lectivos. José Manuel Pinal, director general de Centros de la Consellería de Educación, aseguró que los "grandes beneficiados" de la orden presentada el pasado mes de julio son los alumnos, que recibirán "60.000 horas lectivas más a la semana".

La realidad es algo distinta. Con la reforma que anunció el Ejecutivo gallego, las horas de clase que reciben los alumnos no variará en ningún caso. Los maestros pasarán a impartir cuatro horas más a la se...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Para contrarrestar las críticas de sindicatos y profesores, la Xunta esgrimió ayer una curiosa teoría acerca de la reorganización de horarios lectivos. José Manuel Pinal, director general de Centros de la Consellería de Educación, aseguró que los "grandes beneficiados" de la orden presentada el pasado mes de julio son los alumnos, que recibirán "60.000 horas lectivas más a la semana".

La realidad es algo distinta. Con la reforma que anunció el Ejecutivo gallego, las horas de clase que reciben los alumnos no variará en ningún caso. Los maestros pasarán a impartir cuatro horas más a la semana porque habrá menos docentes, puesto que se reduce la contratación de interinos.

Las críticas de los sindicatos han ido siempre en la misma línea: si se aumenta el horario lectivo del profesorado y se mantiene el de los alumnos, el número de maestros necesarios para cubrir la oferta de un centro merma.

No lo ve así el departamento de Jesús Vázquez, que en la nota de prensa emitida ayer destaca que, con la reorganización de horarios, los profesores podrán "proporcionar más atención y apoyo a los alumnos con mayores dificultades". Pinal, que esta misma semana insinuó que en Galicia sobran medio millar de profesores interinos, volvió a hacer hincapié en el argumento que la Xunta viene reiterando desde hace meses: la medida se hace "en beneficio de la calidad de la enseñanza".

Precisamente en rebatir esta idea se centró Guillerme Vázquez en la marcha de protesta. El líder de los nacionalistas habló de las "políticas regresivas" de la Xunta, que "sigue apoyando con dinero a la enseñanza privada". Vázquez denunció que "diga lo que diga el conselleiro, de lo que se trata es de disminuir los profesores del sistema público".