Las cofradías de Pontevedra apoyan trasladar el marisco
La brecha entre las cofradías del norte y del sur de Galicia se hace cada día más evidente. Mientras los mariscadores de A Coruña, Ferrol y Pontedeume se mantienen firmes en su rechazo al traslado a Xove del molusco de sus bancos, contaminados por bacterias fecales, la Federación Provincial de Confrarías de Pescadores de Pontevedra considera el plan de Mar "un acierto" que les permitirá reducir el furtivismo y ganar puestos de trabajo. "Queremos trabajar, nos sentimos a gusto desarrollando nuestra actividad profesional", aseguran los mariscadores en un comunicado. "Las mariscadoras, en su mayo...
La brecha entre las cofradías del norte y del sur de Galicia se hace cada día más evidente. Mientras los mariscadores de A Coruña, Ferrol y Pontedeume se mantienen firmes en su rechazo al traslado a Xove del molusco de sus bancos, contaminados por bacterias fecales, la Federación Provincial de Confrarías de Pescadores de Pontevedra considera el plan de Mar "un acierto" que les permitirá reducir el furtivismo y ganar puestos de trabajo. "Queremos trabajar, nos sentimos a gusto desarrollando nuestra actividad profesional", aseguran los mariscadores en un comunicado. "Las mariscadoras, en su mayoría, no quieren vivir o depender de subvenciones", reiteran. Piden, asimismo, que Medio Ambiente actúe a fin de garantizar un "correcto sistema de depuración" para el saneamiento integral de las rías.
Los mariscadores de Pontevedra insisten en que la política de ayudas compensatorias a las cofradías puesta en marcha por el bipartito "no dio buenos resultados". Las subvenciones iban destinadas a tareas de limpieza y regeneración, pero, según el pósito, las zonas afectadas no solo no mejoraron su catalogación sino que perdieron producción, lo que "provocó un hábito en las mariscadoras que redundó en la pérdida de apetencia para realizar su actividad extractiva y el cuidado de las playas".
Rechazo en el norte
La noticia de que por primera vez desde 2006 el marisco procedente de las llamadas zonas C -las más contaminadas por E.coli- se podrá comercializar fresco, y no únicamente en conserva, no fue bien recibida por las cofradías del norte. Los mariscadores de Ferrol-Barallobre, A Coruña y Pontedeume se opusieron al plan nada más conocerlo argumentando que el molusco es escaso en sus bancos y que además no alcanza la talla mínima necesaria para poder venderlo.
De las 15 cofradías afectadas por la prohibición de extraer marisco para su comercialización directa, 10 habían suscrito en 2006 un convenio con la Consellería de Pesca que hasta la actualidad le ha supuesto a la Xunta un desembolso de 58.438.345 euros. Las ayudas las recibían los pósito de Ferrol, Barallobre, Mugardos, Miño, Pontedeume, A Coruña, Pontevedra, Lourizán y Baiona, mientras que las de Celeiro, O Barqueiro, Vilanova de Arousa, O Barqueiro y Cambados se quedaron sin ella, según la actual conselleira de Mar, Rosa Quintana, por tener menos capacidad de presión.