La oposición teme que la legalización de Barreiros desate el "caos"
Galicia va por muy buen camino para llegar al "caos urbanístico". El diagnóstico, de la oposición parlamentaria -PSdeG y BNG- fue rotundo tras conocerse que la Xunta retiró 21 de los 50 recursos judiciales presentados por el anterior Gobierno contra otras tantas promociones ilegales en Barreiros, un Ayuntamiento gobernado por el PP. El movimiento desbloqueará 3.174 viviendas construidas en zonas que carecen de servicios o directamente están en terrenos no urbanizables en un municipio con apenas 3.200 habitantes censados. De paso, gracias a una inversión de 14 millones de dinero público en un c...
Galicia va por muy buen camino para llegar al "caos urbanístico". El diagnóstico, de la oposición parlamentaria -PSdeG y BNG- fue rotundo tras conocerse que la Xunta retiró 21 de los 50 recursos judiciales presentados por el anterior Gobierno contra otras tantas promociones ilegales en Barreiros, un Ayuntamiento gobernado por el PP. El movimiento desbloqueará 3.174 viviendas construidas en zonas que carecen de servicios o directamente están en terrenos no urbanizables en un municipio con apenas 3.200 habitantes censados. De paso, gracias a una inversión de 14 millones de dinero público en un convenio respaldado por el PSdeG, los solares se dotarán de infraestructuras que tenían que correr por cuenta de los promotores privados.
El portavoz socialista Ismael Rego y la nacionalista Teresa Táboas aseguraron que la Consellería de Territorio está enviando "un mensaje perverso de que cada uno puede hacer lo que quiera", enterrando la disciplina urbanística. Para el conselleiro Agustín Hernández, que ayer tuvo que explicar la decisión de la Xunta, -acordada en el último Consello de Goberno pero escamoteada a la prensa en la información oficial-, legalizar la urbanización es lo que pretende el convenio firmado con la Diputación de Lugo, gobernada por PSdeG y BNG. "Que no usen un doble lenguaje en este asunto", les reprochó Hernández. Recordó a continuación que las reclamaciones de las promotoras podrían causar "un quebrantamiento económico" al Ayuntamiento y a la Xunta. El BNG siempre se opuso a cualquier actuación para legalizar las viviendas.
Doble lenguaje
Con este último movimiento la Xunta da un paso muy importante para desbaratar el trabajo del anterior Gobierno bipartito, que en 2006 suspendió las normas urbanísticas de Barreiros tras la autorización municipal de 5.800 pisos. A esa suspensión le siguió un contencioso contra la concesión de licencias en terrenos sin los servicios obligatorios que ahora quedará reducido a su mínima expresión.
"El actual Ejecutivo gallego volvió a la legislación a la carta para dar cobertura a incumplimientos ilegales", resumió el PSdeG. Al hilo de ello, la diputada nacionalista y ex conselleira de Territorio incidió en que la Xunta "incumple su propia modificación" de la Ley del Suelo.