Hojiblanca consolida su liderazgo al hacerse con la antigua Fedeoliva

El grupo Hojiblanca ha consolidado su liderazgo como principal productor de aceite de oliva en el mundo al hacerse con las instalaciones de la antigua Fedeoliva, la aceitera que quebró en 2005 por un agujero contable de 40 millones. La cooperativa andaluza con sede en Antequera, que agrupa ya a más de 50.000 olivareros, se hizo en febrero con las instalaciones de Fedeoliva en Guarromán (Jaén) y, en apenas tres meses, ha convertido esta industria en su principal emblema en la provincia más olivarera del mundo, desde donde pretende dar un golpe de timón para impulsar la concentración de la ofert...

El grupo Hojiblanca ha consolidado su liderazgo como principal productor de aceite de oliva en el mundo al hacerse con las instalaciones de la antigua Fedeoliva, la aceitera que quebró en 2005 por un agujero contable de 40 millones. La cooperativa andaluza con sede en Antequera, que agrupa ya a más de 50.000 olivareros, se hizo en febrero con las instalaciones de Fedeoliva en Guarromán (Jaén) y, en apenas tres meses, ha convertido esta industria en su principal emblema en la provincia más olivarera del mundo, desde donde pretende dar un golpe de timón para impulsar la concentración de la oferta, el principal reto que tiene por delante el sector olivarero para influir en los mercados.

Antonio Ávila afirma que la atomización es el principal lastre del sector

"Hay que dejarse de estériles debates territoriales y abandonar los intereses individuales que tanto lastran al cooperativismo", enfatizó ayer el presidente de Hojiblanca, José Moreno, al presentar Agrupa Jaén, un grupo de 21 cooperativas jiennenses que podrán comercializar su aceite desde la planta de Guarromán. En total, Hojiblanca suma ya 91 cooperativas, la mayoría andaluzas, pero también de Ciudad Real y Badajoz, con una producción media de 180.000 toneladas. El objetivo de Hojiblanca es llegar a las 500.000 toneladas, una cifra a partir de la cual, dijo Moreno, se puede tener capacidad de maniobra en los precios del aceite. Para ello, Hojiblanca lanzó ayer un guiño al sector productor mostrándose abierto a nuevas fusiones.

El desembarco de Hojiblanca en la antigua Fedeoliva ha tenido la bendición del Gobierno andaluz, que en febrero le adjudicó en subasta pública, a través de Invercaria, las instalaciones por 2,9 millones de euros al valorar la "solidez" del grupo cooperativo, según reconoció ayer el consejero de Economía, Antonio Ávila. Para el consejero, la excesiva atomización es el principal lastre del sector, y le impide tener capacidad de decisión a la hora de fijar los precios del aceite. Antonio Ávila abogó por la concentración, junto con otras medidas coyunturales como el almacenamiento privado que se está reclamando, sin éxito, en Bruselas.

Hojiblanca va a poner a disposición de sus cooperativas asociadas la industria de Guarromán, que disponen de una bodega para almacenar 8.000 toneladas de aceite, una planta de envasado y un laboratorio de análisis desde el que se quiere impulsar la investigación. La cooperativa andaluza, que facturó el pasado año 451 millones, da empleo a 1.392 trabajadores y, junto con su sede central en Antequera, cuenta con otras plantas en Villarrubia y Monturque (Córdoba), Lora del Río y El Saucejo (Sevilla) y Archidona (Málaga).

Mientras tanto, Luis Gallardo, presidente de Infaoliva, el sector industrial del aceite de oliva, valoró ayer la iniciativa de la Consejería de Agricultura de negar las subvenciones a las almazaras que no acrediten un proceso de fusión. "El que no crea en la unión no le va a quedar más remedio con esta medida", dijo.