Los testigos del crimen del 'botellón' no identifican al detenido

Cinco testigos del homicidio cometido en el botellón de Sevilla el pasado 25 de marzo no reconocieron ayer al supuesto autor del crimen, que permanece en prisión, ni a su presunto cómplice, de 17 años, internado en un centro de menores. Una mujer aseguró ante la juez del caso que vio caer a la víctima, de 23 años, pero no el momento de la agresión ni al detenido por el crimen. La testigo relató cómo el hombre le cayó encima con el pecho manchado de sangre, pero no vio en los alrededores al encarcelado, de iniciales O. R. R. y 33 años. Ante la falta de corroboración por parte de los test...

Cinco testigos del homicidio cometido en el botellón de Sevilla el pasado 25 de marzo no reconocieron ayer al supuesto autor del crimen, que permanece en prisión, ni a su presunto cómplice, de 17 años, internado en un centro de menores. Una mujer aseguró ante la juez del caso que vio caer a la víctima, de 23 años, pero no el momento de la agresión ni al detenido por el crimen. La testigo relató cómo el hombre le cayó encima con el pecho manchado de sangre, pero no vio en los alrededores al encarcelado, de iniciales O. R. R. y 33 años. Ante la falta de corroboración por parte de los testigos de la tesis de la policía, los abogados pedirán a la juez la libertad de los dos encarcelados.

Mientras, el juzgado de Menores tomó declaración a cuatro testigos que aclararon que vieron al joven de 17 años imputado en la zona, pero no participar en la pelea que se entabló ni intervenir en el crimen "como autor, cooperador, ni cómplice", aseguraron las fuentes consultadas. Los testigos confirmaron que antes del homicidio se produjo un enfrentamiento entre dos grupos de jóvenes derivado de los cables de un altavoz, pero en la trifulca no intervino la víctima.

El detenido es un obrero de la construcción en paro residente en San Juan de Aznalfarache (Sevilla), donde vive en la misma barriada que el menor de edad detenido. La policía acusó inicialmente de encubrimiento a este joven, aunque luego la fiscalía añadió una imputación como coautor del homicidio. Los dos detenidos negaron su participación en el crimen y no fueron detenidos hasta el 8 de abril tras la investigación del Grupo de Homicidios de la policía.

La víctima, de iniciales F. J. G. y natural de La Puebla de Cazalla (Sevilla), fue apuñalada en el tórax durante el botellón en la zona del Charco de la Pava al que acudieron unos 6.000 jóvenes y, pese a que fue trasladado al Hospital de Traumatología, falleció en el trayecto.