Menos taurinos, más cómodos
Rus presenta la remodelación de la plaza de toros de Valencia, que ha perdido 1.000 localidades de cara a los festejos de Fallas
La plaza de toros de Valencia ha perdido 1.000 localidades. Lo que supone que los taurinos que asistan a los festejos de Fallas que arrancan el próximo sábado estarán más cómodos. En concreto, 180 euros más cómodos, que es lo que han costado, multiplicados por los 11.000 espectadores en que ha quedado el aforo del coso, las obras de rehabilitación del edificio construido en 1860 por el arquitecto valenciano Sebastián Monleón.
Alfonso Rus, presidente de la Diputación de Valencia, titular de la plaza, presentó ayer las obras de rehabilitación del coso. En esta primera fase se han variado ...
La plaza de toros de Valencia ha perdido 1.000 localidades. Lo que supone que los taurinos que asistan a los festejos de Fallas que arrancan el próximo sábado estarán más cómodos. En concreto, 180 euros más cómodos, que es lo que han costado, multiplicados por los 11.000 espectadores en que ha quedado el aforo del coso, las obras de rehabilitación del edificio construido en 1860 por el arquitecto valenciano Sebastián Monleón.
Alfonso Rus, presidente de la Diputación de Valencia, titular de la plaza, presentó ayer las obras de rehabilitación del coso. En esta primera fase se han variado todos los tendidos, en unas obras que eliminaron en un principio todas las gradas para adaptar la pendiente a la normativa de seguridad de espacios públicos. Con la nueva distribución, la plaza mantiene el mismo número, nueve, de filas de asientos de madera y redistribuye los de la segunda franja en 13 filas de asientos de cemento, ahora con respaldo. Además, se han dispuesto espacios libres para espectadores con alguna discapacidad.
La Diputación de Valencia paga por las obras dos millones de euros
Patrimonio da el visto bueno a la cubierta hinchable
Con esta reforma la plaza pierde 1.000 asientos. Sin embargo, Rus aseguró que cuando en la próxima fase se adapten las nayas (tribunas superiores cubiertas), se ampliará el aforo en 2.000 asientos, para llegar a 13.000.
Las obras presentadas ayer también incluyen la remodelación de los servicios, que se encontraban en un estado lamentable. En concreto se han instalado cinco bloques de aseos en la planta baja y en la planta primera, en una intervención en la que abundan el aluminio y la madera pero respetando la arquería de ladrillo.
El presidente de la Diputación insistió en que las obras han seguido los criterios de intervención de los monumentos declarados bien de interés cultural (BIC) y en que se ha hecho hincapié en la salubridad e higiene de los nuevos servicios, así como en la seguridad del coso, puesto que la nueva distribución permitirá una mejor evacuación en caso emergencia. Además, también se han eliminado humedades en muros y arcos, sobre todo en la zona de sombra.
Por último, Rus explicó que ya cuenta con el visto bueno verbal de la Dirección General de Patrimonio para instalar la polémica cubierta hinchable de la plaza. Se trata de una estructura montable y desmontable (que se instalará desde octubre hasta febrero de cada año).
Rus explicó que la estructura tendrá que respetar escrupulosamente la estructura de la plaza de toros para no dañarla. Y añadió que cuando la Diputación cuente con el permiso final de Patrimonio habrá que estudiar quién la instala, de qué forma y cómo se financia, pero dejó claro que su coste no lo pagará la Diputación. De forma que probablemente tendrá que financiar la instalación la empresa que se haga cargo de los espectáculos invernales.