Un equipo de extremos
Con Juanfran, el Atlético insiste en inventar por los costados en vez de por el interior
La llegada de Tiago al Atlético hace un año fue recibida como una revolución en la casa rojiblanca. Después de 14 años "dando palos de ciego", como reconocen los propios responsables del club, el equipo volvía a encontrar un timonel de ciertas garantías. "Pudo serlo Banega, pero el Valencia pedía ocho millones y tendía a perderse en la noche", puntualizan en los despachos del Calderón.
La conexión con el modelo que giró alrededor de Milinko Pantic con tan buenos resultados parecía de vuelta. El complemento que al creador portugués le proporcionaba Jurado, al que Quique reservaba las se...
La llegada de Tiago al Atlético hace un año fue recibida como una revolución en la casa rojiblanca. Después de 14 años "dando palos de ciego", como reconocen los propios responsables del club, el equipo volvía a encontrar un timonel de ciertas garantías. "Pudo serlo Banega, pero el Valencia pedía ocho millones y tendía a perderse en la noche", puntualizan en los despachos del Calderón.
La conexión con el modelo que giró alrededor de Milinko Pantic con tan buenos resultados parecía de vuelta. El complemento que al creador portugués le proporcionaba Jurado, al que Quique reservaba las segundas partes para que filtrara el último pase aprovechando el cansancio de los rivales dieron sus frutos. Una Liga Europa y una final de Copa. Fue un espejismo. "Estamos a años luz del modelo que plantean Barcelona y Villarreal. El toque, el control, es hoy inviable. Pasan los entrenadores y nada cambia, el modelo está muy definido: dos extremos muy abiertos a los que casi habría que considerar dos delanteros más. Es un sistema valiente pero que te crea muchos desajustes si los atacantes no presionan la salida del balón. Si no lo hacen quedamos en inferioridad en la medular", piensa un técnico con muchos años en la casa.
"Tenemos herramientas, sabíamos a lo que jugábamos, lo que sucede es que, cuando el equipo se había adaptado a la ausencia de Jurado, Simão se va a Turquía. ¡Hablamos de dos titulares! Jurado había mejorado en el físico y su ascendente en el once iba a ser mucho mayor. Y Simão... Tácticamente aportaba muchísimo, era un ejemplo cuando tocaba replegarse. Le añoramos muchísimo", explica Quique.
Fran Mérida, que sonaba como el relevo natural del volante luso, no termina de desarrollar el juego que esperan de él en la dirección deportiva. "La idea es que ejerza de mediapunta, pero solo tiene 20 años. Hay que darle tiempo, como a Mario Suárez, a Keko... El Barça no sería lo que es sin paciencia", prosiguen en el banquillo. Tiago es más contundente. "Nos falta el pase final", afirma. Lo dice él, al que en los primeros partidos de Liga Quique colocó de enganche con unos resultados muy discretos. "No sé jugar de espaldas y no voy a aprender a estas alturas", se sincera. Sin un filtrador por dentro, las características de la plantilla obligan al Atlético a generar el juego muchas veces desde los costados. "Sinceramente, es una tontería pensar que somos previsibles", opina Reyes.
A falta de un desatascador, el club se rearmó, una vez más, por fuera con Juanfran. El extremo fue presentado por la tarde y, aunque no pudo entrenarse, a Quique le dio lo mismo. Lo incluyó en la convocatoria. "No voy a descubrir la pólvora, todos sabemos de su calidad y no necesita un periodo de adaptación", meditaba el preparador antes de confirmarse la llegada de Juanfran. "De no haberse concretado su fichaje y el de Elías, el Atlético aspiraría a entrar en la Liga Europa, y con dificultades", consideran otros componentes del cuerpo técnico.
Elías tampoco parece la solución a las lagunas del Atlético en la construcción. "Nunca me rindo. Soy un jugador con mucha fuerza y mucha llegada al ataque, pero también puedo jugar parecido a Deco, viniendo desde más atrás y trabajando un poco más la pelota", dijo en su presentación el centrocampista procedente del Corinthians. Dos semanas después, el Atlético recibió por fin el tránsfer del futbolista. Con la baja asegurada de Tiago por un pinchazo muscular, esta noche Quique tendrá una variante más para armar la sala de máquinas del centro del campo. Las otras son Assunção, un destructor; Mario Suárez, velocidad sin pausa; y Raúl García. El Calderón le despidió con una pitada contra el Racing. Aun así, Mourinho espera "al mejor Atlético de todos".