Condenado un patrocinador a pagar cinco millones al Valencia

La empresa Product Management Council deberá pagar cinco millones de euros al Valencia por incumplimiento de contrato. Los dueños de la fundación Valencia Experience tendrán que hacer frente a la deuda que contrajeron con el Valencia, que lució la marca en sus camisetas en la temporada 2008-2009 a cambio de seis millones de euros. El club nunca cobró la cantidad estipulada en el contrato, por lo que el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Valencia le dio ayer la razón en su demanda.

La sentencia declara ajustada a derecho la resolución unilateral del contrato suscrito por el Valencia y c...

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La empresa Product Management Council deberá pagar cinco millones de euros al Valencia por incumplimiento de contrato. Los dueños de la fundación Valencia Experience tendrán que hacer frente a la deuda que contrajeron con el Valencia, que lució la marca en sus camisetas en la temporada 2008-2009 a cambio de seis millones de euros. El club nunca cobró la cantidad estipulada en el contrato, por lo que el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Valencia le dio ayer la razón en su demanda.

La sentencia declara ajustada a derecho la resolución unilateral del contrato suscrito por el Valencia y condena a Product Management Council a abonar la cantidad de cinco millones de euros, más los intereses legales de la misma. El club demandaba los seis millones del contrato, pero fueron reducidos a cinco "toda vez que se consiguió contratar con una tercera entidad que atendió el pago de un millón".

El 14 de diciembre de 2007 ambas partes suscribieron un contrato de patrocinio deportivo con el objeto de promocionar la Fundación Valencia Experience durante la temporada 2008-2009. El coste se fijó en seis millones de euros, a pagar en tres fracciones de dos millones.

El Valencia alegó que mantuvo el vínculo con la Fundación Valencia Experience durante lo estipulado, ya que confiaba en las garantías presentadas, además de por las exigencias de Nike, con la que el club mantiene otro contrato. Cualquier otra solución habría implicado no contar con patrocinador en las camisetas y tener que desechar las equipaciones ya confeccionadas, con el coste adicional que eso habría supuesto.