El 41% de las empresas cree normal hacer regalos a cambio de favores
Etnor apunta una extensión del uso de buenas prácticas a pesar de la crisis
El 41% de los empresarios valencianos considera que es una práctica "habitual y extendida" hacer regalos a cambio de recibir favores. Sin embargo, en un claro caso de "incoherencia moral", un 77,5% declara que es "claramente inmoral aceptar favores y regalos a cambio de impulsar decisiones que comportan beneficios para quienes los dan". Es una de las conclusiones que recoge la segunda edición del Observatorio de Ética y Responsabilidad Social de la Empresa que ayer presentó en Valencia la Fundación Etnor para la Ética en los Negocios.
El informe, relativo a 2009, constata que las...
El 41% de los empresarios valencianos considera que es una práctica "habitual y extendida" hacer regalos a cambio de recibir favores. Sin embargo, en un claro caso de "incoherencia moral", un 77,5% declara que es "claramente inmoral aceptar favores y regalos a cambio de impulsar decisiones que comportan beneficios para quienes los dan". Es una de las conclusiones que recoge la segunda edición del Observatorio de Ética y Responsabilidad Social de la Empresa que ayer presentó en Valencia la Fundación Etnor para la Ética en los Negocios.
El informe, relativo a 2009, constata que las buenas prácticas empresariales se extienden con respecto a 2006, fecha del primer trabajo del observatorio, a pesar de la crisis económica. Los empresarios valencianos, en su inmensa mayoría propietarios de pequeñas y muy pequeñas empresas, incorporan la ética y la responsabilidad social de la empresa (RSE) al lenguaje de gestión de sus negocios. "La RSE ya no provoca desbandada", sintetizó Domingo García-Marzá, director del observatorio y catedrático de Ética de la Universidad Jaume I de Castellón.
García-Marzá: "La responsabilidad empresarial ya no provoca desbandada"
Pero una de las pruebas de fuego de esas buenas prácticas surge al analizar la conducta empresarial para averiguar "si la gestión socialmente responsable se va introduciendo o no como parte del carácter de la organización".
Tres centenares de empresarios fueron invitados a calificar ciertas conductas. Mejora en 10 puntos de media respecto a 2006 el número de empresarios que considera "claramente inmorales" prácticas como "hacer facturas ficticias" (94%), "causar daño al medio ambiente" (91%), "no declarar ingresos a la hacienda pública" (86%), "utilizar trabajo sumergido (82%)" o "hacer regalos a cambio de decisiones beneficiosas (77,5%)".
Pero los mismos empresarios reconocen que son prácticas más extendidas ahora que en 2006 la elaboración de facturas falsas (19,5%), el recurso al trabajo sumergido (22%) y aceptar regalos a pesar de su carácter eminentemente inmoral (41%).
"Vistos los datos", concluye el informe, "podemos decir que, si bien es cierto que el lenguaje de la RSE se va introduciendo en la empresa, las conductas, reflejo de la cultura ética de la empresa, siguen mostrando debilidades considerables. Incluso, en algunas ocasiones, se dan muestras de una clara incoherencia moral".
Emili Tortosa, presidente de Etnor, introdujo el acto. Vicent Diego, presidente de la Confederación de Cooperativas, identificó la RSE con "la forma civilizada y madura de hacer empresa". Vicente Folgado, representante de Cierval, subrayó que la RSE "conduce a la mejora de la competitividad de la empresa", pero añadió: "No se puede imponer".