Administración del solitario Benzema

"Esperamos que en enero Kaká vuelva a ser Kaká", dijo ayer José Mourinho tras dirigir el primer entrenamiento en el que el atacante brasileño tocó el balón con el grupo del Madrid desde que le diagnosticaron una lesión de rodilla hace más de cuatro meses.

Kaká no está convocado para jugar hoy contra el Sevilla y, aunque no es un nueve, su ausencia aumenta las dificultades tácticas que tiene Mourinho desde que se lesionó Higuaín. El técnico es un futbolero didáctico al que le gusta exponer su proceso de decisiones. Ayer explicó que los delanteros centros, los nueves, son ca...

"Esperamos que en enero Kaká vuelva a ser Kaká", dijo ayer José Mourinho tras dirigir el primer entrenamiento en el que el atacante brasileño tocó el balón con el grupo del Madrid desde que le diagnosticaron una lesión de rodilla hace más de cuatro meses.

Kaká no está convocado para jugar hoy contra el Sevilla y, aunque no es un nueve, su ausencia aumenta las dificultades tácticas que tiene Mourinho desde que se lesionó Higuaín. El técnico es un futbolero didáctico al que le gusta exponer su proceso de decisiones. Ayer explicó que los delanteros centros, los nueves, son cartas que conviene tener en cantidad suficiente, en el campo y en el banquillo, para cambiarlas en las segundas partes y así alterar el curso de los partidos. Mourinho dijo que ahora tiene un problema porque sólo tiene un nueve: Benzema. Y esto limita su capacidad de maniobra haciendo su plan más predecible para el adversario. "Es bueno que Benzema juegue de inicio si no tenemos problemas durante el partido", dijo ayer Mourinho; "pero si tenemos problemas...".

"Por ejemplo, en Zaragoza, con el 3-0, y con el 3-1, en los momentos finales del partido, no necesitaba atacantes", prosiguió Mourinho. "Necesitaba a Diarra para que me cerrara un poco por ahí... Necesitaba a Granero para que me controlara por allá... No necesitaba nada más ofensivamente. El problema es el día que estamos perdiendo o empatando y nos faltan 20 o 30 minutos y yo quiero hacer un cambio más ofensivo y no lo tengo. Mi intención es intentar leer el partido, intentar percibir la dirección en la que irá... Ahí debo escoger si pongo a Benzema de inicio o no", añadió.

Mourinho dijo que antes de cada encuentro, cuando agota su repertorio científico, se guía por el olfato. "Contra el Valencia tenía la sensación de que sería un partido muy difícil de ganar de inicio", dijo; "por eso me decidí por dejar a Benzema en el banquillo para usarlo después. Y así fue: en los últimos 20 minutos, con el 0-0, le teníamos más fresco para entrar, cambiar de sistema y darle una cosa más al equipo. Contra el Zaragoza tenía la sensación de que después de dos victorias [desde la derrota ante el Barcelona por 5-0] contra el Auxerre y el Valencia, con otro tipo de mentalidad, el equipo podría ir a por la victoria desde el primer minuto y le di la titularidad a Benzema... Para él es mejor jugar de entrada y para Cristiano y Di María también: para ellos es mejor que Karim esté en el campo porque el equipo ha sido construido para un sistema básico de tres atacantes en el que Cristiano y Di María tienen un jugador de referencia en el centro. Así es mejor".