Ripoll se lava las manos y deja que Castellón envíe su basura a Xixona

El Consell asegura que también se recurrirá a Villena si hace falta

La basura de Castellón se enviará a Xixona. Así lo confirmó ayer oficialmente la Consejería de Medio Ambiente a este Ayuntamiento, gobernado por el PSPV. La localidad recibirá en exclusiva los residuos, según comunicó Jorge Lamparero, director general para el Cambio Climático, al alcalde de Xixona, Ferran Verdú. La decisión descarta en principio que parte de las 135.000 toneladas de basura que generan al año los 49 municipios de la Zona 1 (Castellón) se envíen a partir de enero de 2011 también a Villena. Pese a ello, en la reunión del Consorcio XIII (Villena) Lamparero dejó claro que si hicier...

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La basura de Castellón se enviará a Xixona. Así lo confirmó ayer oficialmente la Consejería de Medio Ambiente a este Ayuntamiento, gobernado por el PSPV. La localidad recibirá en exclusiva los residuos, según comunicó Jorge Lamparero, director general para el Cambio Climático, al alcalde de Xixona, Ferran Verdú. La decisión descarta en principio que parte de las 135.000 toneladas de basura que generan al año los 49 municipios de la Zona 1 (Castellón) se envíen a partir de enero de 2011 también a Villena. Pese a ello, en la reunión del Consorcio XIII (Villena) Lamparero dejó claro que si hiciera falta en un momento dado la basura también iría a Villena, según fuentes presentes.

El pasado junio, el presidente de la Diputación de Alicante y presidente del Consorcio XIV (al que corresponde la planta de Xixona), José Joaquín Ripoll, rechazó una petición de Lamparero de trasladar basura desde La Marina Baixa y La Marina Alta a Xixona argumentando que la planta "estaba llena". Sin embargo, ayer evitó pronunciarse.

Verdú trató sin éxito en las dos reuniones del Consorcio XIV (de la comisión de gobierno y de la junta) que Ripoll respondiera qué va a hacer ante la decisión de la Generalitat. Apenas logró que le emplazara a la "próxima reunión" para una respuesta. Antes, el líder del PP alicantino defendió que la llegada de basuras del norte de Castellón a Xixona es competencia de la Generalitat, a través de Vaersa, propietaria de esta planta. Esta situación, según el alcalde de Xixona, supone un "cambio de opinión". "Hasta junio, Ripoll había defendido la postura alicantina, pero se han producido demasiados hechos que hacen que Ripoll y [Francisco] Camps vayan de la mano en el tema de la basura", lamentó Verdú. El regidor insistió en que el Consorcio XIV puede expresar su desacuerdo por varias vías. La portavoz socialista en la Diputación, María Teresa Carbonell, pidió la dimisión de Ripoll.

El Ayuntamiento de Xixona tampoco logró saber ayer, ni en la reunión ni a través de la reso

lución de Medio Ambiente, la cantidad de basura que se enviará a su planta ni cuándo empezará el traslado.Tras la notificación oficial de la decisión, el grupo vecinal Xixona Neta expresó su "preocupación" e "indignación". "No queremos ser el vertedero de Castellón", resumió un portavoz del colectivo, que a renglón seguido criticó la falta de previsión del Consell, el coste que supondrá trasladar los residuos de norte a sur de la Comunidad Valenciana y que la Generalitat esté más pendiente de la Volvo Ocean Race, de la America's Cup o de Ferrari.

Xixona Neta aseguró que "seguirá luchando" por tener una población que siga siendo conocida por su industria de helados y del turrón y no por sus olores. El colectivo insistió en su preocupación por la salud de la población y, preguntados por una posible movilización, aseguró que no se descarta "nada".

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La planta de tratamiento de Xixona se construyó con una capacidad máxima para tratar 150.000 toneladas de residuos al año. Pese a ello, en 2007 llegó a superar ampliamente esa capacidad y recibió cerca de 250.000 toneladas de basura. Esa cantidad empezó a reducirse a partir de ese año. A ello ayudó la inauguración de la planta de tratamiento de El Campello, en noviembre de 2008, y la voluntad del nuevo equipo de gobierno de Xixona, que pasó a manos del PSPV-PSOE, de limitar la cantidad de residuos que entre a la capacidad para la que está preparada la planta.

Xixona pone un límite

Verdú reiteró ayer la voluntad de que la planta no reciba más toneladas que las citadas 150.000. Xixona recibirá este año alrededor de 100.000 toneladas, lo que a juicio del alcalde, deja un margen de entrada exterior de basura de 50.000 toneladas.

Con todo, en su comunicación al Ayuntamiento de Xixona, la Consejería de Medio Ambiente informa tanto al Ayuntamiento como a la entidad pública Reciclados y Compostaje Piedra Negra, SA (gestora de la planta y participada en un 51% por Vaersa), de que traslada la resolución con el objeto "de que se efectúen las adaptaciones que, en su caso, resulten necesarias en dichas infraestructuras y se regule la prestación del servicio en los municipios pertenecientes a la Zona 1 que participen en la presente resolución transitoria" mientras se construye la planta en Cervera del Maestre. En el escrito también se refleja la previsión de construir una estación de transferencia en Benicarló, desde donde se trasladarán residuos a Xixona.

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