La fatiga previa de Miguel García

Dos semanas después de un susto mayúsculo que sacudió al fútbol español, el origen de la parada cardiorrespiratoria que durante 25 segundos mantuvo "muerto" a Miguel García sobre el césped de El Helmántico sigue siendo un misterio. El centrocampista del Salamanca, de 31 años, que mediada la segunda parte cayó fulminado el pasado 24 de octubre frente al Betis, espera una explicación que le saque de la incertidumbre. "Gracias a la rápida actuación de los médicos estoy aquí, solo tardaron esos segundos en llevar el desfibrilador hasta el centro del campo", reconoció ayer el futbolista de Albacete...

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Dos semanas después de un susto mayúsculo que sacudió al fútbol español, el origen de la parada cardiorrespiratoria que durante 25 segundos mantuvo "muerto" a Miguel García sobre el césped de El Helmántico sigue siendo un misterio. El centrocampista del Salamanca, de 31 años, que mediada la segunda parte cayó fulminado el pasado 24 de octubre frente al Betis, espera una explicación que le saque de la incertidumbre. "Gracias a la rápida actuación de los médicos estoy aquí, solo tardaron esos segundos en llevar el desfibrilador hasta el centro del campo", reconoció ayer el futbolista de Albacete, al que el cuerpo avisó de que algo no iba bien antes del descanso. "Tenía unas sensaciones extrañas, me notaba fatigado, pero lo atribuí a la camiseta térmica. Me la quité y, como me sentí mejor, no le dije nada al doctor", dijo García, que no podrá jugar más al fútbol.

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Pese a la preocupación de los médicos, que temen que pueda producirse un episodio de estrés, García, un jornalero que en 14 años de profesional se ha fogueado en Segunda, Segunda B y Tercera, no perdió la compostura. "El fútbol no lo es todo, ya queda en el recuerdo. Voy a disfrutar de mi segunda vida", razonó García, al que el Salamanca, adonde llegó en verano procedente de Las Palmas, respetará su contrato, que finaliza el 30 de junio. "Tenía informes médicos estupendos de cuando estaba en el Cádiz, justo cuando sucedió la muerte de Antonio Puerta. La Junta de Andalucía planteó a todo el que lo quisiera unas pruebas exhaustivas del corazón. Y dieron perfecto", añadió.

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