Un traje nuevo cada partido

Elegante, como siempre, de traje y corbata, Pep Guardiola compareció el sábado marcando tendencia en el banquillo de La Romareda, donde su equipo estrenó traje nuevo: contra el Zaragoza, el Barcelona jugó un 3-4-3. "Vimos que jugaban con tres centrales, así que metimos a Alves en el centro del campo. No lo habíamos ensayado, pero Dani ha jugado en esa posición con Brasil", explicó el entrenador. En el fondo, de lo que se trata es de que se junten los mejores a Messi. A partir de ahí, para Guardiola vale todo, si se parte de un orden que arrope a Leo Messi.

En La Romareda, octavo ...

Elegante, como siempre, de traje y corbata, Pep Guardiola compareció el sábado marcando tendencia en el banquillo de La Romareda, donde su equipo estrenó traje nuevo: contra el Zaragoza, el Barcelona jugó un 3-4-3. "Vimos que jugaban con tres centrales, así que metimos a Alves en el centro del campo. No lo habíamos ensayado, pero Dani ha jugado en esa posición con Brasil", explicó el entrenador. En el fondo, de lo que se trata es de que se junten los mejores a Messi. A partir de ahí, para Guardiola vale todo, si se parte de un orden que arrope a Leo Messi.

En La Romareda, octavo partido de Liga, el Barça salió al campo con la octava alineación del curso. A veces, las circunstancias no le han dejado elegir; otras la necesidad lo ha requerido. El caso es que Guardiola reinventa cada día a su equipo tratando de ofrecer soluciones. Según su criterio es la primera vez que modifica el dibujo, aunque a lo largo del año, y en momentos concretos, los jugadores se haya reubicado en función de las necesidades.

"Cada partido es un sudoku", afirmó Andoni Zubizarreta, el director deportivo, en el descanso del partido del sábado. "Los rivales nos están obligando a pensar en nuevas soluciones partido a partido", añadió. Por si no fuera bastante dolor de cabeza pensar en las trampas que ponen los adversarios a cada paso, al cuerpo técnico se le han ido cayendo jugadores por lesión (Puyol, Messi, Pedro, Xavi, Valdés) y hasta tuvo que prescindir de Abidal por la muerte de su abuelo. Las circunstancias han influido lo suyo para no repetir alineación en ninguno de los partidos jugados este curso.

En cada partido, un traje nuevo. Tantas vueltas ha dado a la alineación que ya han jugado los tres porteros en lo que va de año, algo poco habitual cuando se llevan 13 partidos disputados. Empezó Miño, en la ida de la Supercopa en Sevilla, aunque los siguientes partidos los jugó Valdés. Contra el Copenhague, en la tercera jornada de la primera fase de la Champions, jugó Pinto porque Valdés se indispuso la noche anterior.

Pinto volverá a ser titular mañana en Ceuta, en la Copa. No estarán Valdés ni tampoco Alves, Piqué, Busquets, Iniesta, Villa y Messi, por lo que se prevé que en la lista de convocados entren varios jugadores del filial. Ayer, 13 trabajaron con el primer equipo. La Copa del Rey le resulta muy útil a Guardiola para dar minutos a los que menos juegan.

Más allá de los imperativos impuestos por las lesiones, Guardiola ha intervenido mucho en el equipo. Por norma, el técnico juega siempre con un 4-3-3 de inicio, o eso sostiene. Es cierto que, a ratos, ha jugado con tres atrás, que ha mutado al 4-4-2 durante el desarrollo de algunos partidos y que cuando ha puesto juntos a Mascherano y Busquets pareció claro que jugó con un doble pivote. Guardiola defiende que el dibujo siempre es el mismo, con excepción del que usó en La Romareda. "Normalmente, es solo un punto de partida. El planteamiento siempre es flexible", explica el entrenador, consciente de que muchas veces es el rival quien marca la partida.

"Guardiola sabe utilizar la polivalencia de los futbolistas", destaca Zubizarreta. No miente: Maxwell ha jugado de lateral, como medio y como extremo, siempre por la izquierda y es tan paradigmático en ese sentido como Iniesta y Messi, pero también Adriano, Puyol, Abidal, Busquets, Bojan y Villa han cambiado de posición, dependiendo del traje que se ponga el equipo.