El depósito para la droga incautada en Sevilla ya tiene proyecto
Las pesadillas de los policías y guardias civiles que custodian los alijos de droga incautados en Sevilla podrían finalizar el año que viene. Tras años de peticiones a los jueces para que autoricen la destrucción de los alijos, el depósito común para la droga ha sobrevivido a los recortes económicos de la crisis. La Subdelegación del Gobierno ha finalizado ya el proyecto de remodelación de la delegación de Sanidad Exterior, organismo encargado de la custodia de la droga incautada.
La remodelación del sótano del edificio que alberga el parque móvil del Estado, en la calle Chaves Rey, est...
Las pesadillas de los policías y guardias civiles que custodian los alijos de droga incautados en Sevilla podrían finalizar el año que viene. Tras años de peticiones a los jueces para que autoricen la destrucción de los alijos, el depósito común para la droga ha sobrevivido a los recortes económicos de la crisis. La Subdelegación del Gobierno ha finalizado ya el proyecto de remodelación de la delegación de Sanidad Exterior, organismo encargado de la custodia de la droga incautada.
La remodelación del sótano del edificio que alberga el parque móvil del Estado, en la calle Chaves Rey, está solo pendiente de la licencia municipal para ponerse en marcha. El robo de 154 kilos de cocaína y heroína en la Jefatura Superior de Policía levantó las alarmas hace dos años. Desde entonces, la Unidad contra la Delincuencia y el Crimen Organizado (Udyco) ha pedido a los jueces que autoricen la destrucción de los alijos una vez se han tomado las muestras necesarias, pero, por ahora, estas autorizaciones se retrasan durante meses e incluso años.
A menudo, el juez aplaza la quema de droga por precaución, ya que las defensas suelen pedir contraanálisis. "No hace falta guardar 15 kilos de heroína, pero sí 100 gramos. El problema es que hacen mal la guarda porque es necesario homogeneizar el alijo y no siempre se hace", opina Manuel Manzaneque, abogado especializado en casos de narcotráfico.
El pasado 16 de junio la comisión nacional, que forman el Gobierno y el Poder Judicial, pidió a los 4.500 jueces que autoricen la "inmediata destrucción" de los miles de kilos almacenados en comisarías y acuartelamientos. La Guardia Civil guarda sus alijos en diferentes dependencias, como el cuartel de Montequinto, pero en ocasiones la droga ha permanecido en camiones aparcados al aire libre ante los problemas de espacio. "En algunos depósitos, la antigüedad de algunos alijos es considerable y la droga almacenada sin autorización para su destrucción, muy elevada, llegándose a superar su capacidad de almacenaje en miles de kilos", subraya el informe de la comisión.