El ciberlibro con dos pantallas
Hasta ahora me he resistido al libro electrónico. Tras esta experiencia, muy multimedia, todavía prefiero el papel para leer literatura.
Mi primera vez ha sido con Papyre 6.S. Es el nombre que recibe Alex en España, el primer lector digital basado en la plataforma Android (Google), que fabrica la californiana Spring Design y distribuye la granadina Grammata con 1.000 clásicos de la literatura castellana incluidos. No espere demasiadas modernidades literarias, estas las podrá comprar en las tiendas online de libros electrónicos, para luego descargarlas en su memoria interna de 1,6...
Hasta ahora me he resistido al libro electrónico. Tras esta experiencia, muy multimedia, todavía prefiero el papel para leer literatura.
Mi primera vez ha sido con Papyre 6.S. Es el nombre que recibe Alex en España, el primer lector digital basado en la plataforma Android (Google), que fabrica la californiana Spring Design y distribuye la granadina Grammata con 1.000 clásicos de la literatura castellana incluidos. No espere demasiadas modernidades literarias, estas las podrá comprar en las tiendas online de libros electrónicos, para luego descargarlas en su memoria interna de 1,6 GB o en una tarjeta micro-SD de 2 GB, que viene también con el lector por el mismo precio. Incluso se conecta al ordenador por USB 2.0 donde transferirá sus compras. El aparato lee los formatos ePUB, PDF y txt, entre otros.
El ciberlector de Spring tiene dos pantallas. Una, de seis pulgadas, lleva tecnología de tinta electrónica, la que no cansa la vista. La otra, táctil, en color y de 3,5 pulgadas, da acceso a Internet por conexión inalámbrica wifi. Papyre 6.S no sólo es un ciberlibro; sirve para navegar, enviar y recibir correos electrónicos o escuchar música y ver vídeos.
De entrada, una supone que las dos pantallas son independientes; que en la grande se lee y en la pequeña se surfea por Internet. Ambas están, sin embargo, vinculadas. Los contenidos del navegador se sincronizan en cuestión de segundos con la pantalla de tinta electrónica para leerlos más cómodamente, cambiando el tamaño del texto a placer, aunque pierda el color.
Cualquier libro o diario puede ser subrayado (no es nada intuitivo) o vinculado a una página. Por ejemplo, si lee a Cervantes y conoce un sitio de referencia sobre el autor, lo añade a su versión electrónica del clásico castellano para futuras consultas.
Papyre 6.S tiene cinco botones: encendido, adelante, atrás, volver y sincronización. El mismo que sirve para pasar las páginas del libro abre el menú para guardar los sitios favoritos de Internet, tener varias ventanas del navegador abiertas, subrayar, guardar una copia de la imagen o el vídeo.
Papyre 6.S no es tan ligero como otros ciberlibros, pesa 310 gramos, pero siempre pesará menos que cualquier tocho en papel. Eso sí, es demasiado alto y en consecuencia, poco manejable. También es un rollo que para ir al menú principal (navegador, ajustes, librería, música, etcétera) sólo lo consigues clicando tantas veces como sea necesario la tecla volver.
Si los ebooks de pantalla de tinta electrónica tienen mucha autonomía, algunos incluso semanas, no se puede decir lo mismo de Papyre 6.S. He estado trasteando con él un día entero y la batería se ha esfumado
. Producto: Papyre 6.S (Alex). Empresa: Spring Design. Precio: 449 euros. Sitio: www.grammata.es