Elsur pagó con fondos públicos la deuda de dos empresas con la Seguridad Social
Elsur, la sociedad para la prestación de servicios municipales de El Ejido (Almería) y epicentro de la trama organizada por los implicados en el caso Poniente para aumentar su patrimonio, pagó con fondos públicos las deudas contraídas con la Seguridad Social por dos empresas privadas del empresario sevillano José Amate, encarcelado por su presunta implicación en la trama corrupta. En concreto, las mercantiles del que fuera director de explotación de Elsur recibieron desde octubre de 2008 un total de 1,49 millones para este fin y para el abono de los salarios de sus empleados.
As...
Elsur, la sociedad para la prestación de servicios municipales de El Ejido (Almería) y epicentro de la trama organizada por los implicados en el caso Poniente para aumentar su patrimonio, pagó con fondos públicos las deudas contraídas con la Seguridad Social por dos empresas privadas del empresario sevillano José Amate, encarcelado por su presunta implicación en la trama corrupta. En concreto, las mercantiles del que fuera director de explotación de Elsur recibieron desde octubre de 2008 un total de 1,49 millones para este fin y para el abono de los salarios de sus empleados.
Así se desprende del fallo emitido por el Tribunal Arbitral de Sevilla, que estima que todos estos pagos debieron correr "exclusivamente" a cargo de las subcontratas, a las que exige ahora que devuelvan a Elsur las cantidades aportadas.
La sociedad participada por Agua y Gestión, filial de Abengoa, y por el Ayuntamiento de El Ejido, que le destina un canon anual para que preste los seis servicios municipales encomendados, será también restituida por los pagos que efectuó a las mercantiles en diciembre de 2009 y enero de 2010 para que éstas liquidaran deudas aún por determinar.
Elsur, que accedía a afrontar las deudas de estas empresas privadas cuando, al mismo tiempo, dejaba de pagarles parte de lo que les correspondía por los trabajos realizados, tendrá a su vez que ingresar 2,75 millones a las firmas Arborimar y Maviroad.
Ello pese a que las sociedades de Amate cumplían "defectuosamente" los servicios municipales por los que habían sido contratadas por Elsur. La empresa, sin embargo, admitía y consentía estos incumplimientos, con los que los contratos firmados quedaban en papel mojado.
La resolución del procedimiento mercantil redunda en las irregularidades detectadas entre Elsur y las sociedades privilegiadas por la trama corrupta.