"Los tres goles fueron evitables"

Otra vez la flojera a balón parado echó por tierra el trabajo del Atlético. "Teníamos requetepasada la lectura en el vestuario, pero el hecho de que el gol del empate llegara tan rápidamente en el segundo tiempo nos mató. Si hubiéramos salido con concentración... Nos han ganado con tres goles evitables, algunos previsibles. Tres desastres, en definitiva", se desahogó Quique Flores. El entrenador rojiblanco lamentó especialmente el de Xabi Alonso, solo en el segundo palo, bajo el travesaño, en un córner. "Cuando hemos tenido más tiempo para pensar, nos han marcado a balón parado. Eso me fastidi...

Otra vez la flojera a balón parado echó por tierra el trabajo del Atlético. "Teníamos requetepasada la lectura en el vestuario, pero el hecho de que el gol del empate llegara tan rápidamente en el segundo tiempo nos mató. Si hubiéramos salido con concentración... Nos han ganado con tres goles evitables, algunos previsibles. Tres desastres, en definitiva", se desahogó Quique Flores. El entrenador rojiblanco lamentó especialmente el de Xabi Alonso, solo en el segundo palo, bajo el travesaño, en un córner. "Cuando hemos tenido más tiempo para pensar, nos han marcado a balón parado. Eso me fastidia. Pero, bueno, el tercero también ha sido fatídico... Mis jugadores no se merecían semejante autocastigo", prosiguió.

Su carta abierta al vestuario dejó en evidencia a Enrique Cerezo y sus bravatas. "Seguimos compitiendo en Europa y vamos a jugar la final de la Copa. Otros no pueden decir lo mismo", se presentó en el Bernabéu el presidente del Atlético. Escuchándole, no parecía real el martirio del equipo, que suma 17 derbies sin ganar. Una pena de diez años y medio. Un suplicio de más de 3.800 días con sólo seis empates, dos en casa y cuatro fuera. "Ahora toca agachar las orejas y recuperarse del golpe", afirmó Forlán. El delantero no quiso justificarse en las fatigas del calendario: "No es que estuviéramos cansados. Es que el Madrid estuvo imparable el primer cuarto de hora de la segunda parte. No le pudimos echar mano". "La cantidad de partidos no sirve de excusa. Hemos cometido fallos graves. Regalos que nunca deben realizarse, y menos contra un equipo que sabes que arriba te mata", reconoció Antonio López por más que los técnicos insistan en que la plantilla, corta y mal manufacturada, está "pagando el peaje" de continuar de pie en la Liga Europa (el Valencia espera el jueves en Mestalla).

"Hemos controlado en el primer tiempo al Madrid, pero en el segundo hemos cambiado el chip. No éramos el mismo equipo... Es lo que pasa si al Madrid le das alas. En 17 minutos nos ha metido tres goles porque no salíamos de nuestro campo. Tenemos que mirar eso", tampoco se calló Reyes. El extremo, uno de los jugadores más pujantes del Atlético, tuvo que ser sustituido en el descanso por una lesión en el tríceps sural de la pierna izquierda. Hoy conocerá el tiempo de baja, aunque, en su opinión, no tiene buena pinta: "Duele más la derrota. Pero estoy preocupado. No me voy con buenas sensaciones".

"Tampoco me dio buena pinta. Es obvio que, aparte del inicio en la segunda parte, nos ha condicionado la lesión de Reyes, pero también la de Valera", con un problema en el recto anterior del cuádriceps del muslo izquierdo, dijo Quique. Perea, castigado en el banquillo por sus errores en Mallorca el domingo -"le vendrá bien pensar en sus últimos actos", aseveró el preparador-, entró por el lateral para rechifla de la grada. "Aunque nos quedamos muy atrás, al menos cerramos las líneas de pase del Madrid", concluyó Quique, que lamentó también que a Tiago "le faltase fuelle".