Siete años después Rambla vuelve a presentar de nuevo Parc Castelló
El proyecto ya fue anunciado en 2003 por su antecesor Fernando Castelló
Siete años después, el proyecto de Parc Castelló aún no es una realidad, aunque, al menos, ya tiene prefijado el camino para serlo en el futuro. El vicepresidente del Consell y consejero de Industria, Vicente Rambla, acudió ayer a la capital de La Plana para ensalzar el "más moderno e innovador parque logístico de la Comunidad Valencia". Y estas fueron, más o menos, las mismas palabras que utilizó el entonces responsable de Industria, Fernando Castelló, en 2003, cuando presentó el proyecto.
Entonces, el proyecto se anunció como una iniciativa de la Generalitat, de la que iba a hacerse c...
Siete años después, el proyecto de Parc Castelló aún no es una realidad, aunque, al menos, ya tiene prefijado el camino para serlo en el futuro. El vicepresidente del Consell y consejero de Industria, Vicente Rambla, acudió ayer a la capital de La Plana para ensalzar el "más moderno e innovador parque logístico de la Comunidad Valencia". Y estas fueron, más o menos, las mismas palabras que utilizó el entonces responsable de Industria, Fernando Castelló, en 2003, cuando presentó el proyecto.
Entonces, el proyecto se anunció como una iniciativa de la Generalitat, de la que iba a hacerse cargo el Sepiva, para la que era necesaria una inversión de 100 millones de euros para obtener una inversión inducida de 1.200 millones de euros y la creación de alrededor de 8.000 puestos de trabajo. Industria tenía previsto empezar las obras en 2004 para que, como mucho, en el primer semestre de 2006 estuviera concluido. Finalmente, el proyecto será desarrollado por los propietarios de los más de 1,3 millones de metros, distribuidos en más de 200 fincas, que ocupará el polígono cuya urbanización tiene un coste aproximado de 60 millones de euros. Tal como expuso ayer el vicealcalde de Castellón, Javier Moliner, las previsiones de inversión inducida y de creación de puestos de trabajo, no han variado. Pero nadie se atrevió a hablar de plazos puesto que, de momento, no están redactados ni el proyecto de urbanización ni de reparcelación.
Lo que tampoco ha cambiado en Parc Castelló es la ubicación, que es su principal atractivo, entre la zona sur del puerto y junto a la autovía de acceso a las instalaciones portuarias, en un punto en el que está previsto que se realicen, también, accesos ferroviarios. La zona es especialmente interesante para almacenaje tanto de producto acabado como de materia prima, con lo que la logística será una de las actividades que ocupe un mayor espacio, definido en algo más de 550.000 metros cuadrados, mientras que el resto estará destinado a la implantación de empresas productoras.
El principal escollo que encontró el proyecto fue el de la oposición de los propietarios del suelo a que éste fuera expropiado, ya que querían participar de su desarrollo. Sin embargo, se inició un proceso de expropiación que finalmente fue paralizado tras la mediación del Ayuntamiento de Castellón, que apostaron por incluir a los vecinos en el negocio. "Se perdieron dos años bastante interesantes", reconoció ayer el secretario de la Asociación de Interés Urbanístico Parc Castelló, Ferran Gregori.
Con interés pero sin ofertas
Meses después de que se presentará el proyecto de Parc Castelló, en 2003, el entonces consejero de Industria, Fernando Castelló, aseguró que había empresas interesadas en ocupar hasta 600.000 metros cuadrados de los más de 1,3 millones que ofrecerá el polígono y centro logístico.
Ayer, el secretario de la Asociación de Interés Urbanístico Parc Castelló, Ferran Gregori, que será la que desarrollará el proyecto admitió que no tiene ninguna oferta. Él mismo reconoció que "hace dos años había propuestas muy adelantadas", en referencia al interés mostrado por firmas de los Emiratos Árabes por instalarse en este parque. "Pero la crisis lo ha parado todo", añadió. "Sí hay interés", precisó, pero ofertas, ninguna.
Al hecho de la crisis, Parc Castelló se encuentra con otro escollo y es que los propietarios del suelo e impulsores del proyecto pretenden que sean las empresas que prevean instalarse en el polígono las que costeen la urbanización del mismo, Es decir, que compren solares para convertirlos en parcelas.
La aportación pública es mínima. De momento, el Ayuntamiento de Castellón se compromete a pagar, como máximo, el 40% del coste de la redacción de los proyectos de urbanización y reparcelación (unos 800.000 euros), ya que el resto será aportado por los propietarios de los terrenos. La Generalitat, tal como dijo Rambla, colaborará en la promoción del parque que, según dijo, "es el mejor ejemplo que se puede dar para iniciar la recuperación económica de la provincia y de la Comunidad Valenciana".