Reportaje:

Mano a mano español

Contador, líder, y Valverde, segundo, afrontan con 20 segundos de diferencia las dos etapas finales, las más duras, de la París-Niza

En la Provenza, por fin, los corredores de la París-Niza encontraron sol, pero no por ello dejó Alberto Contador de usar un pañuelo negro en la cabeza, los cabos flotando al viento, asomando bajo el casco, el mismo que le había protegido el jueves, cuando reventó al pelotón subiendo a Mende a cinco grados bajo cero. El aire no va cargado de olor a lavanda, no se oye a las cigarras, el hielo sucio resiste en las cunetas, la primavera se intuye lejana, pero, por lo demás, como si fuera julio, el Tour. "Ha sido una etapa Tour, pero de las duras", corrige, y aumenta, Contador, quien sigue d...

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En la Provenza, por fin, los corredores de la París-Niza encontraron sol, pero no por ello dejó Alberto Contador de usar un pañuelo negro en la cabeza, los cabos flotando al viento, asomando bajo el casco, el mismo que le había protegido el jueves, cuando reventó al pelotón subiendo a Mende a cinco grados bajo cero. El aire no va cargado de olor a lavanda, no se oye a las cigarras, el hielo sucio resiste en las cunetas, la primavera se intuye lejana, pero, por lo demás, como si fuera julio, el Tour. "Ha sido una etapa Tour, pero de las duras", corrige, y aumenta, Contador, quien sigue de líder, aunque su ventaja sobre el segundo, Alejandro Valverde, disminuyó ayer en 4s, hasta los 20s, la bonificación que el murciano arrancó al ser tercero en Aix-en-Provence, donda ganó Peter Sagan. Quedan las dos etapas más duras: la de hoy, con un puerto de primera, el de Vence, a 30 kilómetros de la llegada, en el duro repecho del pintoresco pueblo de Tourrettes. La de mañana, la habitual de Éze, la que Contador, desde que es profesional, siempre ha disputado en fuga: "Puede ser mi salvación en función de lo que suceda en Vence".

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La París-Niza de 2009 se convirtió en un duelo Contador-Luis León que se resolvió el sábado a favor del segundo, después de que el de Pinto se multiplicara hasta vaciarse para controlar a todo el que se movía. Fue la famosa pájara de Fayence, uno de los eslabones más notables en la cadena vital de Contador: "Aquel día aprendí mucho. Me vino muy bien la experiencia para ganar el segundo Tour. Pero este año la carrera no se resolverá en un duelo de Valverde contra mí. Ojalá fuera así porque todo sería más fácil de controlar, pero será como empezar de nuevo: estamos ocho corredores en 42s".

El octavo, el que cierra el grupo, es Sagan, un prodigio eslovaco que cumplió 20 años en enero y que en su segundo mes como profesional ha ganado dos etapas. Ambas, de la misma manera. Como ayer, convirtiendo una pequeña cuesta a menos de dos kilómetros de la llegada en una mina explosiva. Ex campeón mundial júnior de mountain bike, no sólo le dio duro y brillante, sino que, como un maestro, calculó bien los tiempos. "Mi equipo ha hecho lo que ha podido y a algún corte he tenido que salir yo, como uno de León y [Roman] Kreuziger", resumió Contador, quien sólo pide que hoy siga haciendo frío: "Quita las ganas de atacar".

GENERAL: 1. A Contador. 2. A. Valverde, a 20s. 3. R. Kreuziger (R. Checa), a 25s. 4. L. León, a 26s. 5. S. Sánchez, a 29s.

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