Castellón venderá suelo para cuadrar las cuentas
El presupuesto del Ayuntamiento de Castellón para 2010 es superior al del año anterior. En año de restricciones y austeridad, el equipo de gobierno popular ha elaborado unas cuentas de previsión de gastos de cerca de 181 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,4% respecto a 2009. Y eso que el PP ha insistido hasta la saciedad en remarcar que el Gobierno transferirá 6,5 millones menos que el año pasado.
Sin embargo, pese a este recorte en las transferencias y a la previsión de que, por otros conceptos, el Ayuntamiento deje de ingresar otros 3 millones de euros, los populares...
El presupuesto del Ayuntamiento de Castellón para 2010 es superior al del año anterior. En año de restricciones y austeridad, el equipo de gobierno popular ha elaborado unas cuentas de previsión de gastos de cerca de 181 millones de euros, lo que supone un incremento del 3,4% respecto a 2009. Y eso que el PP ha insistido hasta la saciedad en remarcar que el Gobierno transferirá 6,5 millones menos que el año pasado.
Sin embargo, pese a este recorte en las transferencias y a la previsión de que, por otros conceptos, el Ayuntamiento deje de ingresar otros 3 millones de euros, los populares han echado mano de un supuesto para cuadrar sus cuentas y han reflejado como ingresos una futura venta de suelo que, supuestamente, reportará 24 millones de euros. Esta previsión, unida a la de la venta de bienes por un valor de más de 4 millones de euros y a la obtención de préstamos, ha permitido que el capítulo de inversiones se eleve hasta más de 38 millones de euros.
El presupuesto fue aprobado ayer por la junta de gobierno local. El sábado, el alcalde de Castellón, Alberto Fabra, defendió las cuentas destacando la inversión "que supone un incremento de un 29% la inversión para la ciudad", la crítica al Gobierno central y la justificación a las previsiones de la Generalitat valenciana, aunque, "siempre nos gustaría más inversión", tal como dijo. Ayer mismo, el vicealcalde precisó algunas de las inversiones y adujo que la intención del consistorio es "no permitir que la mala coyuntura económica supedite la supervivencia de la calidad de vida en la ciudadanía y la capital".
Sin embargo, los partidos de la oposición, miembros también de la corporación local, aún no han recibido información sobre el presupuesto. Este hecho provocó la crítica del portavoz del Bloc en el Ayuntamiento, Enric Nomdedéu, y del socialista, Juan María Calles, que, en cualquier caso, ya adelantó su desconfianza en la previsión de gastos realizada por el PP. "En un escenario de crisis del sector inmobiliario y con un Plan General de Ordenación Urbana anulado por el Tribunal Supremo y todavía sin volver a ser aprobado por la Generalitat, ¿qué empresa promotora va a comprarle suelo al Ayuntamiento?", se preguntó el socialista.
Calles también aludió a la deuda y atribuyó el incremento presupuestario a la intención del equipo de gobierno de "camuflar" la deuda municipal, que "sólo en 2009 puede haberse incrementado en más de 50 millones de euros".