Entrevista:IVÁN PÉREZ | Jugador de la selección española de waterpolo | Mundiales de Roma

"Los chavales tienen la misma ambición que Estiarte"

Lleva más de 20 años en el hoyo del remolino y no se acaba de hundir. Mide cerca de dos metros y pesa 110 kilos. En estos Mundiales, como siempre, todas las pelotas de España van a parar a Iván Ernesto Pérez (La Habana, 1971). Este cubano nacionalizado español es el último integrante del legendario equipo de waterpolo que ganó los Mundiales de Perth y Fukuoka liderado por Estiarte y Jané. El nexo de una generación con otra. Frente a Serbia, en la final de hoy (21.00, La 2), este boya de referencia puede jugar su partido de despedida.

Pregunta. Muchos le daban por acabado y ha hec...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Lleva más de 20 años en el hoyo del remolino y no se acaba de hundir. Mide cerca de dos metros y pesa 110 kilos. En estos Mundiales, como siempre, todas las pelotas de España van a parar a Iván Ernesto Pérez (La Habana, 1971). Este cubano nacionalizado español es el último integrante del legendario equipo de waterpolo que ganó los Mundiales de Perth y Fukuoka liderado por Estiarte y Jané. El nexo de una generación con otra. Frente a Serbia, en la final de hoy (21.00, La 2), este boya de referencia puede jugar su partido de despedida.

Pregunta. Muchos le daban por acabado y ha hecho un gran Mundial.

Respuesta. Ha sido un año positivo porque en Brescia me han respetado las lesiones y no me he perdido ningún entrenamiento. Con la edad que tengo [38 años], con la plata o con el oro, si termino aquí estaré contento. Tengo que hablar con el entrenador. Hasta ahora lo hemos ido viendo año a año. Pero a día de hoy puede que contra Serbia juegue mi último partido.

"Con 38 años, la final

P. ¿Qué lo mantiene en el agua?

R. Todavía me divierto. Pero cada vez menos. Al final cansa. Necesitas cogerte unas vacaciones, dejarlo, dedicarte a otra cosa, aunque sea en el mismo mundo del deporte. Sigo porque me la paso bien, porque tengo unos compañeros geniales y me divierto. Sobre todo porque me mantengo físicamente bien. Si me estuviese arrastrando por la piscina ya lo habría dejado.

P. En el gol que le hace a Estados Unidos aparece por sorpresa. ¿Cómo hace para esconderse un hombre como usted?

R. Con Guillermo Molina y Felipe Perrone, que son los que juegan en la banda detrás de mí, ya lo habíamos hablado. Nosotros tenemos una jugada que empieza en la banda izquierda y va a la derecha y me la pasan rápido a mí, arriba, para acabar. Como los equipos ya lo saben, iban a estar pendientes. Hablamos de que podíamos hacer un cambio y que, en vez de dármela a mí directamente, se la dieran a Felipe, él se la devolviera a Willy, y Willy me la diera a mí. Nunca la habíamos entrenado. Al final me han dejado un poco libre y con velocidad y potencia la he podido terminar.

P. Parece que sale del fondo de la piscina.

R. Es una batida de piernas. Son los años de práctica.

P. ¿Qué vocación hay que tener para un puesto en el que te pegan, te muerden y te hunden?

R. Pegan bastante. Bastante. Por eso hace falta tener un físico importante y trabajarlo mucho. Si no, yo no habría aguantado.

P. ¿Le queda alguna cicatriz?

R. Algunas. No se me ven mucho, pero las tengo. Tengo una línea en la nariz del mordisco que me dio un defensor italiano.

P. ¿Cuánto tiempo lo han mantenido hundido?

R. No sabría decirlo. En esos momentos, más que contar el tiempo, intento salir. No me he acostumbrado, es desagradable. Estás nervioso y loco por salir.

P. Dicen que los negros se hunden más. ¿Esto implica que usted tiene que entrenarse más que los demás para jugar a este deporte?

R. Nuestras fibras musculares son más de potencia y fuerza, y son más pesadas que las otras. Lo compensas a base de entrenamiento. Pero a mí no me puedes pedir que nade como Guillermo Molina. Del mismo modo que a él no le puedes pedir que haga las pesas que hago yo.

P. ¿Cuánto levanta?

R. Unos 130 kilos. Podría levantar mucho más si no entrenase tanto en agua.

P. ¿En qué se parece este equipo al de Estiarte y Rollán?

R. En las ganas de superarse. En la ambición. Los chavales quieren emular a ese otro equipo que lo ganó todo. Pero el juego ha cambiado. Ahora es bastante más físico que antes.

P. ¿Por qué se entiende tan bien con Guillermo?

R. Hemos jugado juntos en Barcelona y en el Brescia. Nos conocemos muy bien. Los muchachos dicen que hay amor.

P. ¿Se llama Ernesto por el Ché?

R. Juraría que sí.

P. Rafa Aguilar, el técnico, utiliza mucho la tecnología. ¿Sirve?

R. Para conocer al contrario. Tenemos unas pantallas portátiles pequeñitas donde vamos analizando las jugadas de los rivales hasta en la furgoneta. Cómo contraatacan, cómo lanzan...

P. ¿Qué combustible necesita un cuerpo como el suyo?

R. Hoy [ayer] no tenía mucha hambre. Me comí tres lomos con patatas.

P. ¿Cuánto pesa si está fino?

R. 108 kilos.

Iván Pérez emerge para marcar un gol a Estados Unidos en la semifinal.AFP

Sobre la firma

Archivado En