España gana el tercer Mundial de hockey sobre patines consecutivo
España logró anoche el tercer Campeonato del Mundo de hockey sobre patines consecutivo al ganar a Argentina (3-1), en la final disputada en Vigo, ante 4.500 espectadores que llenaron el IFEVI. En un partido vibrante, disputado y resuelto en los últimos cinco minutos, España consiguió así el 14º titulo de su historia. España fue superior a Argentina, aunque le costó enormemente superar a Kenan, el portero argentino. Pero si estuvo acertado el turco, no menos espectacular y decisivo resultó Guillem Trabal, surgido de la inagotable cantera de Sant Hipólit de Voltregà, que salvó a España en...
España logró anoche el tercer Campeonato del Mundo de hockey sobre patines consecutivo al ganar a Argentina (3-1), en la final disputada en Vigo, ante 4.500 espectadores que llenaron el IFEVI. En un partido vibrante, disputado y resuelto en los últimos cinco minutos, España consiguió así el 14º titulo de su historia. España fue superior a Argentina, aunque le costó enormemente superar a Kenan, el portero argentino. Pero si estuvo acertado el turco, no menos espectacular y decisivo resultó Guillem Trabal, surgido de la inagotable cantera de Sant Hipólit de Voltregà, que salvó a España en los minutos finales, cuando sustituyó al portero titular, Sergio Fernández, lesionado.
Argentina, no se rindió, así que no se incomodó por el primer gol de Bargalló, justo en el minuto 10. Dura y veloz como siempre, dispuso incluso de un penalti antes de que Nicolia empatara el partido, ya en el segundo tiempo. Patinó España de manera descarada y vertical, jugando a ratos un hockey dinámico y moderno que alcanzó momentos espectaculares, pero siempre obtuvo respuesta en los albiceleste, por lo que a ratos el partido resultó un intercambio de golpes, un ida y vuelta de marco a marco. En esos momentos tuvo Pedrito Gil, el capitán español, un penalti, pero falló. Finalmente Marc Gual puso en ventaja a España (2-1, minuto 35) y sólo un minuto después, Adroher consiguió el tercero. Mia Ordeig no pudo recoger su medalla, porque en el segundo tiempo fue llevado a un hospital para evaluar las consecuencias de un golpe en las costillas.