"A veces me siento impotente"

A la pista Philippe Chatrier se llega por un pasillo decorado con las fotos de sus campeones. Por ese camino marcha Vivi Ruano, 35 años, que pisa la arena, da un recital de estrategia y sólo se apunta dos juegos. Es segunda ronda y enfrente tiene a Serena Williams (6-2 y 6-0). "El tenis cambió cuando aparecieron las hermanas Williams", resume la española, que hoy juega junto a Anabel Medina la final de dobles de Roland Garros, donde busca su décimo grande. "Fue un punto de inflexión mundial. Cada vez se pega más fuerte. Antes, todo era más táctico. A veces me siento impotente. Soy el ju...

A la pista Philippe Chatrier se llega por un pasillo decorado con las fotos de sus campeones. Por ese camino marcha Vivi Ruano, 35 años, que pisa la arena, da un recital de estrategia y sólo se apunta dos juegos. Es segunda ronda y enfrente tiene a Serena Williams (6-2 y 6-0). "El tenis cambió cuando aparecieron las hermanas Williams", resume la española, que hoy juega junto a Anabel Medina la final de dobles de Roland Garros, donde busca su décimo grande. "Fue un punto de inflexión mundial. Cada vez se pega más fuerte. Antes, todo era más táctico. A veces me siento impotente. Soy el juego de antes: colocar la bola donde le molesta a cada una, pensar qué es lo que más les cuesta. No tengo esa pegada y lo suplo con otras cosas. Cuando ves que no es suficiente, te dices: '¡Qué pena!'. Me impresiona lo fuerte que le pegan. ¡Es una barbaridad!".

Ruano es una excepción en su deporte. Ha ganado en dobles todos los títulos grandes menos Wimbledon, donde perdió tres finales. Durante dos años y medio jugó el partido decisivo de todos los torneos del Grand Slam junto a la argentina Paola Suárez. Ha conquistado dos platas olímpicas. Hoy jugará junto a Medina contra Elena Vesnina y Victoria Azarenka. Dos representantes del tenis fuerza, sobre todo Vicky, que eliminó a Carla Suárez en individuales mientras abucheaba al público y le dedicaba a la rival un corte de mangas. "De la juventud de hoy en día ya no me sorprende nada", dice Ruano. "¡Son tan extrañas para mí! Es una generación tan diferente de la mía... Con ellas todo es posible. Fui a ver a Azarenka, y me dije: 'Esta chica, ¿no entiende que la vida no es así?", continúa. "Ella y Vesnina no leen las jugadas. Te ganan por fuerza. Mejores estrategas que yo no sé si hay muchas. Como yo...".

¿Y la final? "Muchas veces se lo digo a Anabel", contesta Ruano, lectora compulsiva, que lo mismo se ocupa de libros de psicología que del exitoso Stieg Larsson; "Si tú estás cansada, si tú estás nerviosa, ¡mira a las otras! Tal vez nunca hayan jugado un partido como éste, de esta categoría, con esta importancia. Hay veces que solamente nos miramos a nosotras mismas, cuando también hay que mirar al contrario. Preguntarse: 'Si yo estoy así... ¿Cómo estará el otro?' Ayuda el haber pasado ya por eso. Saber que es posible. Real".

Mujeres. Semifinales: D. Safina (Rus.)-D. Cibulkova (Esl.), 6-3 y 6-3. S. Kuznetsova (Rus.)-S. Stosur (Aust.), 6-4, 6-7 (5) y 6-3. Hoy: R. Soderling-F. González. R. Federer-J. M. Del Potro.