Reportaje:Ida de los cuartos de la Liga de Campeones

"Nunca sufrí tanto en mi vida"

Beckenbauer expresa el dolor alemán y Rummenigge añade: "Nuestro orgullo fue pisoteado"

La defensa del Bayern las venía venir, impotente ante las embestidas certeras del contrario. Y la portería adversa, en el horizonte, le quedaba demasiado lejos. Un disparo de Ribéry que blocó Valdés; un remate de Zé Roberto que sacó Puyol. Se acabó lo que se daba. Un partido sensacional del Barça que encarrila la vuelta en el Allianz Arena. "Recordaremos mucho tiempo esta primera parte, una de las mejores de la historia del Barça", se lanzó Joan Laporta, orgulloso presidente azulgrana; "un juego espectacular que cualquier aficionado del futbol, aunque no sea del Barça, disfruta". Jürgen Klinsm...

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La defensa del Bayern las venía venir, impotente ante las embestidas certeras del contrario. Y la portería adversa, en el horizonte, le quedaba demasiado lejos. Un disparo de Ribéry que blocó Valdés; un remate de Zé Roberto que sacó Puyol. Se acabó lo que se daba. Un partido sensacional del Barça que encarrila la vuelta en el Allianz Arena. "Recordaremos mucho tiempo esta primera parte, una de las mejores de la historia del Barça", se lanzó Joan Laporta, orgulloso presidente azulgrana; "un juego espectacular que cualquier aficionado del futbol, aunque no sea del Barça, disfruta". Jürgen Klinsmann, técnico del Bayern Múnich, recogió el testigo, apesadumbrado y derrotado: "Nuestro juego ha sido una gran decepción porque el estilo del Barça nos ha mostrado nuestros límites". La plantilla del Barcelona, habituada a deshacerse de los agasajos como de las victorias sin jugar los partidos, rechazó que la ronda esté sentenciada.

Guardiola rebaja la eurotia: "Ya diremos lo bueno que somos una vez clasificados"
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La gran preocupación del Barça era Luca Toni, kilométrico delantero que lo remata todo. Ayer, nada de nada. "No ha sido tan complicado marcarle porque apenas le han llegado balones; los de arriba nos han ayudado mucho", aseguró Piqué. "Se trataba de hacerles correr con el movimiento del balón", apuntó Pep Guardiola, técnico azulgrana; "y si no han podido salir en ofensivas, es por la buena transición ataque-defensa y el juego posicional realizado". Klinsmann volvió a dar su versión pesimista: "Es bastante posible que nos haya ganado el campeón de Europa". Lo mismo opinó Franz Beckenbauer, presidente del Bayern. "En la primera parte he sufrido más que nunca en mi vida". Y añadió Karl Heiz Rummenigge, director general del club bávaro: "Estamos eliminados. Vi a Udo Lattek llorar en el descanso; no sé si fueron lágrimas de ira o tristeza. Somos un club orgulloso y ese orgullo ha sido pisoteado". Guardiola pidió la palabra: "El United también estaba en la final y el Oporto se lo ha puesto difícil. Queda correr y sudar mucho".

También apelaron a la prudencia los jugadores del Barça. "Es un resultado buenísimo, pero los partidos hay que jugarlos y en el fútbol nunca se sabe", señaló Iniesta. "Tenemos mucho ganado, pero en el fútbol se han visto cosas peores", añadió Piqué. Lo cierto es que de puertas para adentro lo vieron bastante resuelto. Así lo indica la tarjeta provocada de Márquez, que acarrea sanción. "¿Se ha notado?" preguntó al tiempo que sonreía; "en la media parte lo he hablado y el mister me dijo que, si todo seguía igual, la provocara". Pero Guardiola retomó el discurso comedido. "Para la vuelta en Múnich nos convendrá ir en serio y, una vez clasificados, ya diremos lo buenos que somos". Algo que no impide, sin embargo, analizar el encuentro de anoche. "Hemos jugado uno de los encuentros más completos y el mérito es del Barça", convino Iniesta, que se llevó la camiseta de Oddo. "Hemos disfrutado mucho", abundó Piqué. "Una gran noche de fútbol ante un grande de Europa, donde el Barça ha sido superior", resolvió Laporta.

De menos humor estaba Klinsmann, ya puesto en entredicho en la portada del Bild al acabar el duelo. El técnico, que ya sufrió un 5-1 ante el Wolfsburgo la semana pasada, echó balones fuera. "Cada jugador ha perdido demasiado tiempo mirando lo que tenía que hacer su compañero", aseguró; "y tras el duelo, nadie ha dicho nada en el vestuario". Lo contrario que en el del Barça: "Lo que me emociona es el esfuerzo de los jugadores", reveló Guardiola. Un esfuerzo casi definitivo.

Iniesta centra ante Oddo, que se lanza al suelo, y Demichelis.

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