Naufragio generalizado del bipartito en Lugo
"Probablemente fue un castigo a los desencuentros del bipartito". Lo dijo un concejal socialista de Lugo cuando trataba de encontrar una explicación al descalabro electoral en la provincia, donde socialistas y nacionalistas hicieron agua por todas partes y perdieron apoyos en casi todos los municipios, incluso allí donde gobernaban. Es el primer retroceso serio de los socialistas en Lugo, que habían iniciado un ascenso imparable desde que en 1999 conquistaron, contra todo pronóstico, la alcaldía de la capital.
Hubo lágrimas en la sede socialista, donde el alcalde, Xosé López Orozco, pas...
"Probablemente fue un castigo a los desencuentros del bipartito". Lo dijo un concejal socialista de Lugo cuando trataba de encontrar una explicación al descalabro electoral en la provincia, donde socialistas y nacionalistas hicieron agua por todas partes y perdieron apoyos en casi todos los municipios, incluso allí donde gobernaban. Es el primer retroceso serio de los socialistas en Lugo, que habían iniciado un ascenso imparable desde que en 1999 conquistaron, contra todo pronóstico, la alcaldía de la capital.
Hubo lágrimas en la sede socialista, donde el alcalde, Xosé López Orozco, pasó casi toda la noche reunido con el coordinador de campaña, Luís Ángel Lago, y con el presidente de la Diputación, José Ramón Gómez Besteiro. Nadie lo quiso reconocer públicamente, pero hubo quien arremetió en privado contra el "egocentrismo" del ya ex presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño y el afán "desmedido" por hacerlo todo a su manera.
A Mariña luguesa le falló al bipartito. También la zona sur. El varapalo fue grande para el BNG en Monforte. Y una teórica extrapolación de datos daría la alcaldía en la que se sienta el socialista López Orozco, la de la capital lucense, al PP.
En la derecha, pasaron del pesimismo cuando se conocieron los datos de participación a sostener que su resultado es consecuencia de haber tomado decisiones que "no fueron ni fáciles ni bien entendidas". El presidente provincial del partido, José Manuel Barreiro, se asienta al frente del PP de Lugo.