Elecciones 1-M | La campaña

El PP aparta de la primera línea al otro fichaje económico de Feijóo

El candidato se presenta como "aliado de los parados y la política honesta"

Pedro Arias no ganó ayer el primer debate económico entre los candidatos de los tres partidos. Tampoco lo perdió. No confrontó sus propuestas con el responsable económico del PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga. Ni siquiera estuvo para responder a la acusación del conselleiro nacionalista de Industria, Fernando Blanco, cuando espetó que el Partido Popular propone el despido libre.

El otro fichaje estrella, el gurú al que Feijóo habia encomendado las soluciones a la crisis -junto al dimitido Luis Carrera Pásaro, ex cabeza de lista por Ourense- no se sentó ante los micrófonos de la Cadena SE...

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Pedro Arias no ganó ayer el primer debate económico entre los candidatos de los tres partidos. Tampoco lo perdió. No confrontó sus propuestas con el responsable económico del PSdeG, Xaquín Fernández Leiceaga. Ni siquiera estuvo para responder a la acusación del conselleiro nacionalista de Industria, Fernando Blanco, cuando espetó que el Partido Popular propone el despido libre.

El otro fichaje estrella, el gurú al que Feijóo habia encomendado las soluciones a la crisis -junto al dimitido Luis Carrera Pásaro, ex cabeza de lista por Ourense- no se sentó ante los micrófonos de la Cadena SER. Y no lo hizo porque Pedro Arias ha dejado de ser el referente económico del PP.

La invitación de la emisora proponía un debate entre los responsables del área económica de las tres formaciones. Alberto Núñez Feijóo prefirió afrontar el envite con un economista mesurado, Pedro Puy, representante del PP en el Consello de Contas e ideológicamente muy alejado de las tesis de Arias. La dirección del PP ha apostado por la ortodoxia en perjuicio de las ideas neocon. Y el número seis por A Coruña ha adelantado al segundo.

El lunes, en Vigo una periodista obligó al líder del PP a hacer equilibrios con el lenguaje cuando le preguntó quién sería su conselleiro de Economía. "El equipo económico lo forman dos personas, Pedro Puy y Pedro Arias [cuando se presentaron las listas eran tres, con Carrera Pásaro] y cualquiera de ellos será mejor que el actual, que ni siquiera va en las listas del PSOE. En su momento tomaré la decisión".

A juzgar por lo oído ayer, el PP tiene todo menos un equipo en el área económica. Antes de que su partido empezase a esconderlo -Arias sólo ha intervenido una vez al lado de Feijóo desde que fue presentado hace casi un mes-, en un momento en que la crisis monopoliza el argumentario de los populares, el controvertido economista defendía el despido libre y la necesidad de un expediente regulación de empleo en la Xunta.

Ayer, los candidatos socialistas y nacionalistas se lo plantearon directamente a Puy, que negaba con la cabeza. "Nadie ha hablado aquí del despido libre, sino de todo lo contrario. Lo que propugna el PP es el gasto social", replicó. No mintió. Eso es efectivamente lo que plantea el programa electoral en el que se curtió durante los últimos meses el ex conselleiro de Contas.

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Frente al ultraliberalismo de Arias, de quien muchos reniegan en el partido, Puy propone, y volvió a hacerlo ayer, unas cuantas rebajas fiscales, a la espera de conocer el modelo de financiación autonómica. También huyo del catastrofismo de Arias, que estos días se aplica en A Coruña contra la asignatura de Educación para la Ciudadanía.

Muy pocos candidatos están en esa guerra. El propio Feijóo también la evita. Ayer se presentó en Ribadavia y Cangas como el "aliado de los parados, de los intereses generales de Galicia y de la política honesta". Reprochó a sus rivales "que tengan como prioridad política a Feijóo en lugar de preocuparse por Galicia" y reeditó su apuesta por el turismo.

Cuando el candidato ya se había marchado, José Luis Baltar acusó directamente al conselleiro de Medio Ambiente y candidato por su provincia, Manuel Vázquez de difundir en Internet consignas para tachar el nombre de Luis Carrera e invalidar por tanto los votos. "Una mamarrachada y una sinvergüencería", denunció.

Antes, el candidato local había acusado a Zapatero de vender bombas de racimo prohibidas a nivel internacional. Y de defender a los palestinos al tiempo que arma al Estado de Israel.

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