ISIDRE FAINÉ | Reordenación del sector energético

Accionista, vendedor y posible financiador

Pese a que es la necesidad de vender repsoles por parte de Sacyr el origen del culebrón Lukoil, La Caixa intenta aprovechar el escenario para sacar partido. Es el segundo accionista de Repsol, con un 12,4% del capital, e influye en su gestión a través del presidente de la petrolera, Antoni Brufau. Su brazo inversor Criteria, que salió a Bolsa para darle recursos para su expansión pero que, contaminada por la crisis global, vale un 48% menos que hace un año, apuesta más por las inversiones financieras que por las industriales. Así, una desinversión parcial en Repsol le iría como anillo a...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Pese a que es la necesidad de vender repsoles por parte de Sacyr el origen del culebrón Lukoil, La Caixa intenta aprovechar el escenario para sacar partido. Es el segundo accionista de Repsol, con un 12,4% del capital, e influye en su gestión a través del presidente de la petrolera, Antoni Brufau. Su brazo inversor Criteria, que salió a Bolsa para darle recursos para su expansión pero que, contaminada por la crisis global, vale un 48% menos que hace un año, apuesta más por las inversiones financieras que por las industriales. Así, una desinversión parcial en Repsol le iría como anillo al dedo, siempre que la petrolera rompiera en su favor su control conjunto con la caja en Gas Natural.

Más información

Además, pese a la fortaleza financiera de La Caixa (tiene un elevado nivel de recursos propios de máxima calidad, un 8,8%, una solvencia del 12%, con un superávit de 6.091 millones respecto al mínimo exigido y 26.491 millones de liquidez), a Criteria le vendría de perlas allegar recursos extra: en 2009 se ha comprometido a acudir a la ampliación de capital de hasta 3.500 millones de su participada Gas Natural para comprar Unión Fenosa. De ahí que, para facilitar la venta del 20% de la apurada Sacyr a Lukoil y de paso sacar plusvalías vendiendo parte de su parte en Repsol, la caja que preside Isidre Fainé y dirige Juan María Nin ha confesado negociar con Lukoil e incluso busca a otros bancos que la acompañen como posibles financiadores de la adquisición de hasta un 9,9% de Repsol adicional al 20% de Sacyr. "No hay ningún acuerdo", dice la entidad, a la que tampoco motiva apostar por una operación si disgusta al ambiguo Gobierno.