"Siempre me ha perseguido la palabra regularidad"

El futbolista siempre dispuesto a arrancar una carcajada a su interlocutor se ha puesto serio. Joaquín acaba de perder una lucha jurídica contra una empresa de representación que cree que utilizó en 2006 los servicios de otras personas para negociar su posible traspaso, que nunca se cerró, del Betis al Madrid. Los tribunales han ordenado el embargo de sus bienes, pues le reclaman casi dos millones de euros. Pero el extremo del Valencia trata de centrarse en el fútbol, en dejar su firma en el carril derecho de Mestalla, que sigue reclamando al Joaquín por el que suspiró. No al que ven algunos d...

El futbolista siempre dispuesto a arrancar una carcajada a su interlocutor se ha puesto serio. Joaquín acaba de perder una lucha jurídica contra una empresa de representación que cree que utilizó en 2006 los servicios de otras personas para negociar su posible traspaso, que nunca se cerró, del Betis al Madrid. Los tribunales han ordenado el embargo de sus bienes, pues le reclaman casi dos millones de euros. Pero el extremo del Valencia trata de centrarse en el fútbol, en dejar su firma en el carril derecho de Mestalla, que sigue reclamando al Joaquín por el que suspiró. No al que ven algunos domingos.

Su Valencia defiende mañana el liderato de la Liga en Huelva. Es un equipo nuevo, en el que "se respiran sensaciones diferentes tanto dentro como fuera del campo", reconoce el gaditano. Se hicieron las cosas mal, muy mal: "No era lógico que un conjunto como el Valencia estuviera luchando por no descender". ¿Y los responsables? "Buscar culpables ahora ya no sirve para nada", matiza.

"No tengo ninguna culpa de los 25 millones. Para mí, es una anécdota"

"Emery no lo ha tenido fácil. No es fácil llevar a jugadores de mucho nombre"

- Su falta de constancia. Los valencianistas le reclaman mayor constancia. Están cansados de ver cómo combina actuaciones brillantes con tardes anodinas. "Siempre me ha perseguido la palabra regularidad", reconoce; "soy un futbolista que necesita estar bien tanto psicológica como físicamente. Necesito tener una tarde alegre para jugar bien al fútbol".

Pero no le pesan los 25 millones que el Valencia desembolsó por él. "Sí, es mucho dinero. He sido el futbolista más caro de la historia del club. Pero no es mi culpa. Para mí, es simplemente una anécdota", dice. "Asumo que se espere más de mí. Al que sabe se le exige", añade.

- La psicología de Unai Emery. Joaquín fue titular el domingo pasado en Mestalla tras desayunar con la noticia del embargo de sus bienes en la prensa. No le gustó. "Uno es profesional e intenta olvidarse cuando sale al campo. Pero es un tema personal al que se le ha dado demasiada importancia". ¿Habló con Unai Emery? ¿Se presta a ese tipo de conversaciones más personales? "El míster, aparte de ser un gran entrenador, tiene su parte de psicólogo. Le tenemos ahí como técnico, pero también, si algún día le necesitamos, como amigo o consejero", responde.

Emery se ha metido a los jugadores en el bolsillo. Y no es "un chollo" como dijo Miguel Ángel Lotina, técnico del Deportivo, entrenar a este Valencia: "No es fácil llevar un equipo con futbolistas de mucho nombre, estar todos los días con ellos, lograr que estén concentrados y sacarles el ciento por ciento. Unai no lo ha tenido fácil". Y sus lecciones calan como la lluvia fina que caía ayer en Valencia: "Lanza muchos mensajes. Es muy psicólogo e intenta transmitirnos positividad, alegría, unión. No para de repetir que debemos ayudarnos unos a otros y, aunque no se quiera, algunos mensajes se quedan".

- Su mala relación con Koeman. El del Puerto de Santa María cree que Ronald Koeman, su ex técnico, sí entendía su sentido del humor, "pero no le gustaba". "Cuando uno choca un día, otro y otro, al final, la cosa explota. Pero, afortunadamente para mí y para el Valencia, ya no está aquí". Del holandés -"no es de los mejores entrenadores que me he encontrado", apostilla- llegó a contar que sólo se preocupaba por el vino de la cena en las concentraciones. Koeman había declarado que Joaquín, pese a su elevado coste, no tendría en la actualidad un precio de salida superior a los 30 euros. Y éste le respondió. "Uno que se pica y está un poco caliente. No tenía que haberlo hecho, pero entré al trapo", se excusa ahora.

- Su fracasada marcha al Madrid. ¿Podría Bernd Schuster achacar a Joaquín falta de ambición como hizo con Villa? "Para estar en el Valencia hay que tener una exigencia máxima y una ambición enorme. Si Villa se ha quedado es porque lo cree mejor. Respecto a mí, del interés del Madrid se ha hablado muchas veces. No me preocupa porque no es nuevo. Estoy en un gran equipo y no echo de menos otra cosa", sostiene.

Para comprobar su estado anímico, un chiste. ¿No guarda siempre uno en la recámara? "Tengo muchísimos. Pero ahora la cosa no está para contar chistes. En otras circunstancias, me dirían 'cállate ya, Joaquín". Entonces, ¿no siempre está de broma? "No. Además, aunque parezca que por mi forma de ser las cosas me duelen menos, me duelen igual que a todo el mundo".