Irreconocible Nadal

Todo empezó a las tres de la tarde: John McEnroe se levantó para bailar al ritmo de los Rolling Stones, el público se coordinó con su movimiento para celebrar en pie el partido nuevo y Sam Querrey, el gigantón estadounidense, se llevó el segundo set tras ver cómo Rafa Nadal sacaba para ganarlo. En ese instante, el encuentro pasó de trámite a verdadero problema para el tenista español. Nada hizo Querrey para que así fuera. Nadal jugará contra Mardy Fish por un puesto en las semifinales del Abierto de Estados Unidos tras un partido romo, menor en su despliegue y preocupante en sus manera...

Todo empezó a las tres de la tarde: John McEnroe se levantó para bailar al ritmo de los Rolling Stones, el público se coordinó con su movimiento para celebrar en pie el partido nuevo y Sam Querrey, el gigantón estadounidense, se llevó el segundo set tras ver cómo Rafa Nadal sacaba para ganarlo. En ese instante, el encuentro pasó de trámite a verdadero problema para el tenista español. Nada hizo Querrey para que así fuera. Nadal jugará contra Mardy Fish por un puesto en las semifinales del Abierto de Estados Unidos tras un partido romo, menor en su despliegue y preocupante en sus maneras. Estuvo muy por debajo de su fantástico nivel habitual (6-2, 5-7, 7-6 y 6-3). "Todo se complicó tras el juego de 5-4 en el segundo set. Fue un desastre", dijo Nadal; "sufrí mucho, pero lo importante es estar en los cuartos".

El número uno, que vivió varios descansos con una bolsa de hielo en su cabeza, pareció fatigado. Tuvo palabras para el juez de silla. "Es la primera vez que oigo algo así", le dijo cuando el viento soplaba a favor y le fue prohibido reclamar la asistencia del ojo de halcón. Contó con una pista muy lejos del lleno, en la que el público apenas entró en el partido. Y acabó firmando unas estadísticas que dan cuenta de su errática tarde: más de 40 fallos no forzados, unos malos porcentajes de primer servicio (en torno al 64%) y un número inusitado de dobles faltas para las bajas velocidades de su primer saque (cinco). El campeón estuvo irreconocible.

Ahora aguarda Fish, un jugador ante su gran oportunidad para confirmar lo que siempre apuntó: que es temible en pista rápida. Busca un gran resultado "desesperadamente". "Me siento más fuerte y más fresco que nunca", avisó tras vencer a Monfils con su tenis estilo década de los 70; "siento que a Nadal no le guste ver enfrente a un tipo con mi estilo. Hay que acabar los puntos rápido. No jugaré necesariamente un tenis al estilo kamikaze, pero voy a mantener los puntos lo más cortos posibles".

Octavos de final: M. Fish (EE UU)-G. Monfils (Fra.): 7-5, 6-2 y 6-2. R. Nadal-S. Querry: 6-2, 5-7, 7-6 y 6-3. T. Robredo-J. W. Tsonga (Fra.): 7-6, 6-3 y 6-2. N. Djokovic (Ser.)-M. Cilic (Cro.): 6-7, 7-5, 6-4 y 7-6. / Rafa Nadal, el español más famoso del mundo (lalistaWIP)