música

Eötvös exorciza el maleficio de las adaptaciones de Gabo

Ovacionada en el Reino Unido la versión en ópera de 'Del amor y otros demonios'

El maleficio que pesa sobre las adaptaciones de obras de Gabriel García Márquez -especialmente fallidas en el cine- ha sido exorcizado gracias a una ópera de Peter Eötvös que toma como inspiración el libro Del amor y otros demonios (1994). Así se desprende de la gran ovación dispensada por el público del Festival de Glyndebourne (sur de Inglaterra), en el estreno mundial de la pieza.

El rico universo sonoro del compositor húngaro ha utilizado elementos del barroco hispano, el canto gregoriano e incluso ritmos africanos como marco musical para relatar la historia de Sierva María d...

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El maleficio que pesa sobre las adaptaciones de obras de Gabriel García Márquez -especialmente fallidas en el cine- ha sido exorcizado gracias a una ópera de Peter Eötvös que toma como inspiración el libro Del amor y otros demonios (1994). Así se desprende de la gran ovación dispensada por el público del Festival de Glyndebourne (sur de Inglaterra), en el estreno mundial de la pieza.

En su quinta obra, el compositor explota el ambiente multicultural de la trama de la novela

El rico universo sonoro del compositor húngaro ha utilizado elementos del barroco hispano, el canto gregoriano e incluso ritmos africanos como marco musical para relatar la historia de Sierva María de todos los Ángeles, la hija de un marqués supuestamente endemoniada y que acaba siendo criada por esclavos en la Latinoamérica colonial del siglo XVIII. Descrita por Eötvös como una ópera "de amor muy emocional", la que es su quinta obra explota el ambiente multicultural de la trama que, si bien cantada en inglés, recurre también al yoruba, al latín y al español para recitar un soneto de Garcilaso de la Vega.

Las primeras críticas han avalado la calurosa acogida dispensada el domingo. Destacan la originalidad de la música, su inventiva armónica y los excelentes decorados de Helmut Stürmer, que incluyen proyecciones de vídeo de Andu Dumitrescu y evocan los colores y la atmósfera de la comunidad de esclavos. El primero de los dos actos carece del suficiente potencial dramático, pero en la segunda parte éste adquiere otra dimensión apuntalada por la percusión de la London Philarmonic Orchestra, bajo la batuta del joven director ruso Vladímir Jurowski.

Eötvös, enamorado de la producción literaria del Nobel colombiano, sufrió el revés de la baja por enfermedad de la soprano Marisol Montalvo, superado por el aplomo y dotes como cantante y actriz de su sustituta, la australiana Alison Bell. Destacaron, asimismo, en el reparto la voz cavernosa del sueco Mats Almgren (el obispo Don Toribio), la angustia que el barítono americano Nathan Gunn logra imprimir al personaje del padre Cayetano Montalvo y la calidad vocal de la inglesa Felicity Palmer (la abadesa). Rico plantel internacional para una ópera que todavía tiene pendientes otras siete representaciones este agosto en Glyndebourne. Un festival acusado en ocasiones, e injustamente, de provinciano y que, sin embargo, ha logrado llevar a buen puerto una de sus apuestas más valientes y arriesgadas.

Allison Bell (izquierda), en el papel de Sierva María en la versión operística de Del amor y otros demonios.EFE

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