Rescate desesperado a 7.400 metros de altura

El alpinista Ochoa de Olza resiste, muy grave, en el frío intenso del Annapurna

Sin habla y semiinconsciente, auxiliado por un montañero que le suministra nieve derretida para que su sangre no se espese, a 7.400 metros de altitud y sometido a un frío intenso. El alpinista navarro Iñaki Ochoa de Olza resiste en las cumbres del Annapurna (Himalaya) en estado muy grave a la espera de un rescate desesperado.

Sin habla y semiinconsciente, auxiliado por un montañero que le suministra nieve derretida para que su sangre no se espese, a 7.400 metros de altitud y sometido a un frío intenso. El alpinista navarro Iñaki Ochoa de Olza resiste en las cumbres del Annapurna (Himala...

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Sin habla y semiinconsciente, auxiliado por un montañero que le suministra nieve derretida para que su sangre no se espese, a 7.400 metros de altitud y sometido a un frío intenso. El alpinista navarro Iñaki Ochoa de Olza resiste en las cumbres del Annapurna (Himalaya) en estado muy grave a la espera de un rescate desesperado.

Sin habla y semiinconsciente, auxiliado por un montañero que le suministra nieve derretida para que su sangre no se espese, a 7.400 metros de altitud y sometido a un frío intenso. El alpinista navarro Iñaki Ochoa de Olza resiste en las cumbres del Annapurna (Himalaya) en estado muy grave a la espera de un rescate desesperado. Según los médicos, sufre un edema cerebral o una trombosis. Uno de los mejores equipos de alpinistas del mundo está en camino. Es fundamental que Ochoa baje a 4.000 metros para que pueda ser trasladado en helicóptero.

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