"Lo único que se ha hecho a los coches es lavarlos"

La magia del circuito de Sepang tal vez no le baste este año a Fernando Alonso. El piloto español afronta la segunda carrera del campeonato, el GP de Malaisia, sin grandes aspiraciones, visto el rendimiento de su coche en la carrera inaugural del curso en Australia. "Lo único que les han hecho a los coches desde Melbourne ha sido lavarlos", comenta irónico el asturiano. "No espero mejoras en relación al nivel que tuvimos en Australia. Sin embargo, en este circuito siempre he dado el máximo y para mí no estar en la última fase de la clasificación (la Q3) sería una decepción. Sabes que puede pas...

La magia del circuito de Sepang tal vez no le baste este año a Fernando Alonso. El piloto español afronta la segunda carrera del campeonato, el GP de Malaisia, sin grandes aspiraciones, visto el rendimiento de su coche en la carrera inaugural del curso en Australia. "Lo único que les han hecho a los coches desde Melbourne ha sido lavarlos", comenta irónico el asturiano. "No espero mejoras en relación al nivel que tuvimos en Australia. Sin embargo, en este circuito siempre he dado el máximo y para mí no estar en la última fase de la clasificación (la Q3) sería una decepción. Sabes que puede pasar, pero sería un paso negativo".

En Australia, Alonso no lo consiguió. Se quedó fuera por menos de una décima. Constató dónde está realmente el R28, muy atrás, lejos de Ferrari, McLaren y BMW y en las proximidades de Toyota, Red Bull y Williams. El circuito de Sepang puede ayudar algo esta vez por sus características -largas rectas y piso en muy buen estado- y por el hecho de que Alonso se siente muy a gusto en este trazado, en el que ha conseguido algunos de los resultados que han marcado su vida deportiva.

Se recuerda todavía aquella carrera disputada al límite en 2003, cuando consiguió en Malaisia su primera pole y su primer podio. Acabó tercero, y llegó a la meta exhausto, sin haber podido beber agua porque su sistema de bombeo se había estropeado, y completamente deshidratado. Desde entonces ha ganado dos veces (2005 y 2007) y acabó segundo en 2006, tras Fisichella, básicamente porque sus mecánicos le pusieron por error el doble de gasolina en la clasificación y tuvo que salir desde la séptima posición.

"Las condiciones de la carrera serán muy duras e incluso puede que llueva, aunque prefiero que no lo haga, porque entonces la carrera se convierte en una carambola para todos", agrega Alonso. Las temperaturas oscilarán entre los 35 y los 37 grados. Tal vez no sean tan elevadas como en Melbourne. El principal problema en Sepang es la humedad. "Esta carrera será mucho más dura que la de Australia", asegura Fabricio Borra, que se ocupa de la condición física de Alonso. "Con la humedad hay menos oxígeno y se hace más difícil respirar. Fernando tiene una gran capacidad aeróbica y desde una hora después del GP de Australia comenzamos a trabajar en la recuperación del esfuerzo. En Australia perdió entre 3,5 y 4 litros durante la carrera y aquí va a ocurrir lo mismo. Eso significa que se produce una falta de energía que puede provocar la pérdida de algo de concentración y de reflejos. Alonso se ha preparado a conciencia para esta situación y la afronta con garantías".

La única prueba en calor que ha realizado este año Renault fue en la carrera de Australia y las conclusiones no fueron especialmente buenas. "El coche perdió mucho agarre en el tren trasero, porque los neumáticos se deterioraron muy rápido. Lo que hemos estado intentando toda la semana es evitar tanto desgaste. Pero veremos qué ocurre. Yo firmaría el cuarto puesto como en Australia, pero soy realista y sé que la situación era peor de lo que mostró aquella clasificación. La única ventaja es que tenemos mucho margen de mejora tanto en aerodinámica como en suspensiones y podemos acercarnos. McLaren, Ferrari y BMW seguro que están mucho más cerca de sus límites".