Necrológica:

Shu Uemura, revolucionador del arte del maquillaje

El creador familiarizó a Occidente con la estética facial japonesa

El japonés Shu Uemura, revolucionador en el arte del maquillaje y desarrollo de artículos avanzados de tratamiento y limpieza de la piel, falleció de neumonía a los 79 años el pasado 29 de diciembre, informaron fuentes de su empresa homónima, una de las marcas más prestigiosas del sector, con filiales en Nueva York, Los Ángeles, París, Londres, Milán, Singapur y Taipei.

Nacido en Tokio en 1928, Uemura, cuyos cosméticos se mencionan en la película El diablo viste de Prada -protagonizada por Meryl Streep- comenzó su andadura como el único estudiante masculino de la escuela de belle...

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El japonés Shu Uemura, revolucionador en el arte del maquillaje y desarrollo de artículos avanzados de tratamiento y limpieza de la piel, falleció de neumonía a los 79 años el pasado 29 de diciembre, informaron fuentes de su empresa homónima, una de las marcas más prestigiosas del sector, con filiales en Nueva York, Los Ángeles, París, Londres, Milán, Singapur y Taipei.

Nacido en Tokio en 1928, Uemura, cuyos cosméticos se mencionan en la película El diablo viste de Prada -protagonizada por Meryl Streep- comenzó su andadura como el único estudiante masculino de la escuela de belleza en la que se graduó en la capital de la conservadora sociedad japonesa de los años cincuenta.

Tras licenciarse, se trasladó a Estados Unidos, donde fue el único maquillador japonés en el elitista mundo del celuloide. Su gran oportunidad le llegó en el rodaje en 1962 de la película Mi dulce geisha, protagonizada por Shirley MacLaine. Cuando su maquillador enfermó, el joven Uemura fue llamado a sustituirle, quien se vio catapultado así al reconocimiento de Hollywood. En los siguientes años, fue el maquillador favorito de varias celebridades, como el cantante y actor Frank Sinatra y su colega Edward G. Robinson.

Regresó a Japón en los sesenta, cuando el país renacía de las cenizas de la II Guerra Mundial para irse convirtiendo en la segunda potencia económica mundial. En 1967 abrió Japan Makeup, predecesora de la gran firma internacional, Shu Uemura Cosmetics, que creó en 1982, cuando la economía japonesa vivía un gran auge y Tokio comenzaba a ser uno de los centros mundiales de vanguardia en la moda. Uemura impulsó e hizo famosos productos como el aceite limpiador del maquillaje, las brochas hechas a mano, los perfumes y sus voluptuosas pestañas postizas.

Lanzó en los años setenta el nuevo concepto "colecciones temporales" de maquillaje con temas y colores para cada época del año, creó los primeros "espectáculos de maquillaje" como arte y estableció concursos para descubrir nuevos talentos del mundo entero. En los ochenta desarrolló y puso a la venta sus productos avanzados de tratamiento de la piel en el extranjero. Su empresa pasó a ser parte del gigante francés de la cosmética L'Oréal en 2004.

Uemura formó parte de la generación de creadores del gusto japonés que lideran la influencia de Japón en el mundo, en los ámbitos del diseño y la moda, como los modistos Issey Miyake y Kenzo Takada. A Uemura le sobreviven su esposa y un hijo.

Shu Uemura.

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