Reportaje:Televisión

Diez días para cambiar de vida

Antena 3 rehabilita las viviendas de cuatro familias en el programa de telerrealidad 'Esta casa era una ruina'

Es un cambio radical pero menos lacerante: si la temporada pasada Antena 3 aplicó la cirugía estética a personas que requerían una nueva imagen para transformar su vida, ahora es el turno de los hogares. La cadena privada estrena esta noche (22.00) Esta casa era una ruina, donde el motor de esa metamorfosis es la vivienda.

El programa ha seleccionado a cuatro familias afectadas por catástrofes naturales o problemas de salud, y con problemas económicos, de las 7.600 —para Cambio radical llamaron 45.000 personas— que solicitaron ayuda. Y emitirá sus historias en cuatro ...

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Es un cambio radical pero menos lacerante: si la temporada pasada Antena 3 aplicó la cirugía estética a personas que requerían una nueva imagen para transformar su vida, ahora es el turno de los hogares. La cadena privada estrena esta noche (22.00) Esta casa era una ruina, donde el motor de esa metamorfosis es la vivienda.

El programa ha seleccionado a cuatro familias afectadas por catástrofes naturales o problemas de salud, y con problemas económicos, de las 7.600 —para Cambio radical llamaron 45.000 personas— que solicitaron ayuda. Y emitirá sus historias en cuatro especiales. El primero, hoy, en un parón en la producción de la comedia La familia Mata.

En EE UU acudió a la llamada del programa hasta Laura Bush

"Se les ofrece una segunda oportunidad", sostiene Ana Rivas, directora de programas de Antena 3. "Es casi magia", añade. Sólo así es posible convertir una caravana sin tomas de luz ni de agua en un hogar con cocina, cuarto de baño y calefacción en 10 días, el plazo que estipula el formato. La afortunada familia se retira a un balneario mientras los operarios ejecutan la reforma. Jorge Fernández (La ruleta de la suerte) dirige el operativo. Asesoradas por decoradores de interiores y exteriores, las cuadrillas —y los voluntarios del pueblo que se suman a la iniciativa— se turnan para tener la obra lista a tiempo y "a la medida de sus necesidades", según Jaime Guerra, coproductor ejecutivo.

"Es el programa más emotivo y más humano que he podido realizar", resume Fernández. "Es como una ONG". No hay "morbo" ni "aprovechamiento" de los dramas familiares que se traslucen de la situación, se defiende el presentador. Los primeros protagonistas son los Albacete, unos vecinos de Tordera (Barcelona). María José, de 44 años, y cinco de sus siete hijos, uno de ellos con síndrome de Down. Malviven en unos módulos prefabricados y precariamente instalados en un terreno de su propiedad. Hasta la llegada del autobús de Esta casa era una ruina.

Los siguientes agraciados son unos vecinos de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) afectados por una riada; una familia de Torrevieja (Alicante) en la que las mujeres sufren una enfermedad degenerativa que les obliga a utilizar silla de ruedas y, consecuentemente, a adaptar la casa; y una pareja de Colmenar de Oreja (Madrid) que se casó joven, por un embarazo inesperado, y que no ha tenido la oportunidad de diseñar un hogar confortable.

Zeppelin TV (Gran Hermano) ha adaptado este formato, que se estrenó en EE UU en 2003. ABC ha ganado con este concurso dos Premios Emmy. Como en el caso español, es una evolución de Extreme makeover (Maquillaje extremo), que ofrece cirugía estética a espectadores descontentos con su aspecto. Y aquí, como en la versión original, se reclama la solidaridad colectiva. En EE UU acudió a la llamada hasta la esposa del presidente, Laura Bush, que participó en la reconstrucción de una vivienda afectada por el huracán Katrina.

Vivienda de los primeros participantes del programa.
Jorge Fernández (centro), con los asesores de Esta casa era una ruina.

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