"Nos faltó profundidad"

"Es lo que hay", afirmó Frank Rijkaard en la sala de prensa del Nuevo Sardinero al empezar su justificación por el resultado de un partido visto muchas veces en el curso pasado. "Nada es fácil. Sabíamos que el Racing es un equipo complicado y así ha sido. Se ha defendido con mucho orden", respondió el entrenador azulgrana, que, lleno de resignación, invitó al equipo a "trabajar y hablar mucho".

El entrenador del Barcelona despidió a sus jugadores a pie de campo, animándoles después de la primera decepción de la temporada. "No es momento para perder la confianza tan pronto. Esto acaba de...

"Es lo que hay", afirmó Frank Rijkaard en la sala de prensa del Nuevo Sardinero al empezar su justificación por el resultado de un partido visto muchas veces en el curso pasado. "Nada es fácil. Sabíamos que el Racing es un equipo complicado y así ha sido. Se ha defendido con mucho orden", respondió el entrenador azulgrana, que, lleno de resignación, invitó al equipo a "trabajar y hablar mucho".

El entrenador del Barcelona despidió a sus jugadores a pie de campo, animándoles después de la primera decepción de la temporada. "No es momento para perder la confianza tan pronto. Esto acaba de empezar", explicó. Rijkaard fue rotundo al justificar por qué dejó a Henry fuera de la alineación: "Tuve que elegir. Por eso dejé a Deco y Henry fuera". Más tarde, en cambio, se estiró para dar razones del mal juego del equipo: "No ha sido nuestro mejor día, es verdad. Nos faltó frescura para marcar las diferencias". Rijkaard se confesó preocupado tras advertir durante el primer tiempo un juego demasiado "previsible".

"No jugamos al espacio. Tenemos que trabajar y corregir el exceso de circulación horizontal porque eso nos hace previsibles. Necesitamos jugar con mayor profundidad", explicó el técnico, que sustituyó a Messi cuando parecía el jugador mas incisivo del equipo amparándose en esa percepción. "Queríamos profundidad. Henry también ha creado su peligro. En el primer tiempo era más de lo mismo", dijo.

Tampoco Deco, que empezó de suplente la temporada, pareció preocupado. Ni por lo suyo ni por lo que afecta al equipo. "Creamos ocasiones y ellos también, pero pudimos ganar el partido", dijo el centrocampista al analizar los 90 minutos. "No estoy enfadado por haber sido suplente. Antes del partido no he salido a calentarme porque me estaba vendando los tobillos", aclaró consciente de que su ausencia levantó sospechas. Tampoco Messi, sustituido pese a jugar a buen nivel, parecía contrariado por ello. "Es una decisión del míster que respeto. Esta vez me tocó a mí. No pasa nada", se limitó a decir el argentino.

"¡Basta de 'fantásticos!"

Ronaldinho argumentó: "El Racing sabía a qué jugaba. Nos ha complicado mucho las cosas. Ahora hay que pensar en el próximo partido y trabajar fuerte", resumió; "veo al equipo en el buen camino, aunque nos ha faltado el gol". A Xavi le empieza a poner de los nervios la cancioncita del verano sobre el Barça de los cuatro fantásticos, así que ayer respondió con vehemencia. "¡Basta de fantásticos!", bramó el centrocampista, harto de una cantinela que, se teme, pueda terminar por perjudicar al Barcelona.

"El tema de los fantásticos ya cansa. En el vestuario hablamos de equipo, de bloque, y para eso trabajamos. Es lo que buscamos", insistió Xavi; "hemos tenido ocasiones y no las hemos aprovechado, pero la actitud ha sido buena".