El desastre urbanístico de la Costa del Sol, visto desde el aire
El urbanismo salvaje que ha sufrido la provincia de Málaga en la última década -313.000 viviendas entre 1996 y 2005- ha acabado por enterrar la Costa del Sol bajo un alud de ladrillos. Los espacios libres en los 90 kilómetros de litoral que discurren entre Málaga capital y Manilva, en el límite con Cádiz, escasean.
El territorio padece ya los consecuentes problemas de tráfico, abastecimiento, residuos e inseguridad. La situación no se limita a Marbella, sino que se extiende a Mijas, Fuengirola y Estepona, y amenaza con saltar a la segunda línea de costa. EL PAÍS ha fotografiado el desas...
El urbanismo salvaje que ha sufrido la provincia de Málaga en la última década -313.000 viviendas entre 1996 y 2005- ha acabado por enterrar la Costa del Sol bajo un alud de ladrillos. Los espacios libres en los 90 kilómetros de litoral que discurren entre Málaga capital y Manilva, en el límite con Cádiz, escasean.
El territorio padece ya los consecuentes problemas de tráfico, abastecimiento, residuos e inseguridad. La situación no se limita a Marbella, sino que se extiende a Mijas, Fuengirola y Estepona, y amenaza con saltar a la segunda línea de costa. EL PAÍS ha fotografiado el desastre desde un helicóptero.