"Trato de reinventarme en cada partido"

Lesionado como se había quedado Belletti en el margen derecho del campo, Deco bajó a defender, recogió la pelota en campo propio y enfiló el área contraria. Como le taparon bien, tras dos cambios de ritmo que recordaron su versión ofensiva en el Oporto y varios recortes de calidad, se escoró al lateral hasta forzar la falta. Con un resoplido y un gesto de aquiescencia, le dejó sacar el golpe franco a Xavi, que acababa de salir y, por consiguiente, estaba fresco. Luego, después de que Márquez peinara el centro del volante y Saviola rematara al palo, el balón rebotó en las rodillas de Fer...

Lesionado como se había quedado Belletti en el margen derecho del campo, Deco bajó a defender, recogió la pelota en campo propio y enfiló el área contraria. Como le taparon bien, tras dos cambios de ritmo que recordaron su versión ofensiva en el Oporto y varios recortes de calidad, se escoró al lateral hasta forzar la falta. Con un resoplido y un gesto de aquiescencia, le dejó sacar el golpe franco a Xavi, que acababa de salir y, por consiguiente, estaba fresco. Luego, después de que Márquez peinara el centro del volante y Saviola rematara al palo, el balón rebotó en las rodillas de Fernando Navarro y el Barça se impuso al Mallorca por la mínima en el último minuto. Un gol que fue posible por la tremenda jugada de Deco (São Bernardo do Campo, Brasil; 1977), que se destapó como conductor más que como pasador. Hoy le aguarda el Getafe en las semifinales de la Copa. Deco, competitivo por definición, tiene gazuza. Frank Rijkaard, que siempre le consideró "el barómetro del equipo", le elogió públicamente.

"A veces nos cuesta más ganar. Y las preguntas, en ocasiones, son agresivas. No estábamos preparados para ello"

"Hay gente que quiere verme fuera del club, que ya me ha echado. Pero no me molesta porque busca otros intereses"

"El encuentro con el Getafe nos lo debemos tomar, y nos lo tomamos, como si fuera la final de la 'Champions"

"El problema ha sido la falta de gol. Nos ha faltado Eto'o muchos meses. Habría garantizado 15 o 20 goles"

Pregunta. Cuando llegó al Barça, dotó al equipo de un juego en corto, con la presión avanzada, transiciones rápidas y disparos desde media distancia. ¿Se parece en algo ese Barça al de las últimas fechas?

Respuesta. Según qué partido. Si el marcador es favorable, juegas a tocar y llegas al marco contrario con facilidad. Pero, si no, buscas más profundidad. Es lógico que, si pretendes alcanzar un resultado y las cosas no están saliendo bien, intentes jugar de manera distinta y pruebes otras variantes.

P. ¿Cómo su jugada personal contra el Mallorca?

R. Puedo jugar más atrás, más adelantado... Esta temporada, dentro de nuestro sistema, ya he jugado en todas las posiciones posibles del centro del campo. La cuestión no es dónde, sino que trato de reinventarme en cada partido. Así puedes sorprender al rival o ganar un partido.

P. Quizá el problema es que al Barça le está costando más de lo previsto imponerse a los rivales, ¿no?

R. Eso es la última moda. Ahora se dice que el Barça juega mal o que es peor que hace un tiempo. Pero yo creo que, por ejemplo, el otro día, contra el Mallorca, se jugó bien. Si hubiésemos ganado por 3-0, no habría existido ningún debate. Entiendo que el 1-0 es un marcador justo y que son los resultados los que mandan. Pero insisto en que se hizo un buen partido. Es más, creo lo contrario de lo que se nos acusa; tiene mucho mérito que el Barça marcara un tanto en el minuto 90 cuando todo el equipo adversario estaba encerrado en su área y apenas dejaba espacios.

P. ¿Le molestan las críticas que recibe el Barça?

R. No. Pero creo que son desmesuradas.

P. ¿Y las que le hacen a usted?

R. Tampoco. Desde el principio de curso, hay gente que me quiere ver fuera del club, que ya me ha echado. Pero no me molestan los rumores porque los lanza gente que busca otros intereses.

P. Pero han faltado Messi y Eto'o varios meses por lesión y Ronaldinho también se ha perdido algún que otro partido. ¿Nota la presión o la responsabilidad de tirar del equipo?

R. La presión, por un lado, me gusta. Pero la responsabilidad es de todos. No creo que sea algo mío específico. Creo que nos hemos ido turnando. Cuando ha fallado uno, ha aparecido otro, y así continuamente. Por ejemplo, Iniesta jugó a un nivel tremendo parte de la temporada. Luego, Valdés nos ha salvado puntos en otros partidos... Podría ser mejor porque el equipo a veces no funciona perfectamente, pero se está haciendo una buena temporada.

P. ¿Y por qué no funciona a veces el equipo?

R. Creo que no tiene una explicación en sí. Unas veces se falla en un sitio; otras, en otro, y en ocasiones los rivales también nos superan. No creo que el problema sea del mediocentro o del lateral como se dice por ahí. En el fútbol hay una cosa clara. Cuando no juegas bien, no marcas goles. Y, por el contrario, si lo haces bien, los marcas. Así, en un equipo, las diferencias las marcan los delanteros. Aunque la tarea del gol es cosa de todos, suelen ser los delanteros los que marcan, los que definen los partidos. Y por delanteros entiendo todos los jugadores que están en posiciones avanzadas. Por eso se habla de ellos, por eso el gol se paga tan caro y por eso lo que ha hecho Ronaldinho esta temporada tiene muchísimo mérito. No se le puede criticar con la cantidad de goles, puntos y alegrías que ha dado al equipo. Yo, sin embargo, no he marcado tantos como debiera y quisiera: uno en la Liga, dos en la Champions y otros dos en la Supercopa española.

P. ¿Es en eso, entonces, en lo que ha fallado el Barça, en la falta de goles?

R. Sí, creo que ése ha sido el principal problema del equipo, la falta de gol. Nos ha faltado Eto'o durante muchos meses. Él nos habría garantizado unos 15 o 20 goles en ese espacio de tiempo en el que ha estado lesionado. Y ésos son muchos goles. Messi también ha faltado mucho tiempo y, como ha demostrado, también puede ser determinante en este equipo. Con ellos, ya casi estaría ganada la Liga. Además, hemos acusado la marcha de Larsson, que tenía unas características distintas, que por su forma de jugar hacía mucho daño en las defensas rivales y que, encima, te garantizaba una buena suma de goles. Guddy [Gudjohnsen] es distinto. Sale más de la zona, baja a buscar balones y ayuda en la construcción. Pero no finaliza tanto. Y, así, pierdes una de las referencias en el ataque.

P. ¿Les ha afectado también a algunos las críticas que han hecho los propios jugadores desde el vestuario?

R. Eso es algo que ha pasado, pero que no puede volver a pasar. Y menos si no es verdad lo que se dice. Está claro que el equipo puede mejorar, pulir algunos defectos... Pero eso es una cosa que tenemos que hacer todo el vestuario unido. Las cosas, primero, se deben tratar entre nosotros y, después, si se deben airear o hacer públicas, que sea con el consentimiento de todos.

P. ¿Pero por qué cree que se han aireado esas acusaciones?

R. Tengo una teoría personal. En las dos últimas temporadas todo en el Barça ha sido maravilloso. Desde los jugadores hasta los aficionados, desde los directivos hasta los medios de comunicación, se ha vivido en una nube. Siempre se enfatizaba el buen rollo que presidía el equipo. El Barça jugaba de maravilla y ganaba. Pero las cosas han cambiado. El equipo sigue siendo el líder y con una ventaja notable. Pero a veces nos cuesta más ganar. Entonces, las preguntas de los periodistas cambiaron. Ya no son tan amables, sino que en ocasiones son agresivas y nos atacan. ¿Qué ha ocurrido? No estábamos preparados para este tipo de cuestiones, para unas preguntas de difícil respuesta.

P. ¿Pero, si el Barça no gana la Liga, se daría por satisfecho?

R. Claro que no. Ni mucho menos. Pero opino que las conclusiones sobre el equipo se deben hacer cuando concluya la temporada y no en su transcurso. Además, pienso que no se está valorando al Barça.

P. ¿Por qué?

R. No sé cuántos equipos han conseguido ganar tres Ligas consecutivas, si finalmente la conseguimos otra vez. Eso es algo que está al alcance de muy pocos. Hace tres cursos, por ejemplo, ganar la Liga era el objetivo más grande de este club. Ahora, ganarla parece algo fácil, algo que no tiene ningún mérito. Es increíble. Parece que sea una obligación. ¿Es que estamos locos? Conquistar la Liga no es tarea sencilla, ni mucho menos. Sólo hay que mirar el dinero que se gastan el Madrid, el Valencia o el Sevilla, que dan la vida por conquistarla. No podemos considerar este campeonato como un premio menor. Tiene un valor enorme y ya es hora de que la gente se dé cuenta.

P. ¿Y cómo valora su temporada?

R. De momento, es buena. Si ganamos la Liga y la Copa, será mejor.

P. ¿Qué le parece el Getafe?

R. Es un equipo complicado. Supongo que vendrá al Camp Nou con la misma idea que el Mallorca, la de defenderse. Pero es un conjunto más complicado. Juega muy bien al contragolpe y tiene delanteros con gol, de los que saben definir. Además, su idea es la de sacar un buen resultado para llegar con posibilidades a la vuelta. Nosotros debemos hacer lo contrario: tomarnos el encuentro, y nos lo tomamos, como si fuera la final de la Champions.