Fútbol | Liga de Campeones: vuelta de los octavos de final

El Roma y el Chelsea, adelante

Mancini ya no es sólo el apellido del entrenador del Inter. Desde ayer también es el apodo de un matagigantes: el brasileño del Roma firmó con un gol espléndido la eliminación del Olympique de Lyon, un equipo que lleva años amagando y sin pegar. Los franceses volvieron a cerrar a las primeras de cambio una temporada europea llena de grandes perspectivas, inaugurada con un juego vigoroso y a ratos infalible, pero que acabó congelado en el frío de su propio estadio. El Roma ganó con solvencia y resistió incluso la violencia de Fred, que sacó dos veces el codo de paseo hasta que le partió la cara...

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Mancini ya no es sólo el apellido del entrenador del Inter. Desde ayer también es el apodo de un matagigantes: el brasileño del Roma firmó con un gol espléndido la eliminación del Olympique de Lyon, un equipo que lleva años amagando y sin pegar. Los franceses volvieron a cerrar a las primeras de cambio una temporada europea llena de grandes perspectivas, inaugurada con un juego vigoroso y a ratos infalible, pero que acabó congelado en el frío de su propio estadio. El Roma ganó con solvencia y resistió incluso la violencia de Fred, que sacó dos veces el codo de paseo hasta que le partió la cara al rumano Chivu (0-2).

El Chelsea, como el Lyon, también es un equipo diseñado para grandes cosas. Ayer estuvo a punto de seguir el camino de los franceses. El Oporto diseñó un contraataque que fue una lección de movimientos sin balón frente a una defensa absolutamente descolocada. El estoque lo puso el ex barcelonista Quaresma. Y la cara de piedra, Terry, capitán y central titular del Chelsea, todavía convaleciente de la patada que le dejó inconsciente en la final de la Copa de la Liga inglesa.

Con el Oporto a los mandos, el Chelsea recurrió a lo más viejo del fútbol inglés: balones al área y centros frontales. Sin éxito. Sólo consiguió empatar con un disparito de Robben. Fue un gol de chiste. Un balón botando desde 25 metros que se encontró con Elton, portero del Oporto e internacional por Brasil, ciego. Luego, su defensa le dejó vendido ante Ballack (2-1).

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