Crónica:Fútbol | Copa del Rey: ida de los octavos de final

Torres y nada más

El ariete, con un gran tanto, consigue el empate del Atlético ante un Osasuna muy conservador

Fernando Torres, gracias a un soberbio gol cuando su equipo estaba jugando fatal y además tenía un futbolista menos, le hizo un torniquete de urgencia a un Atlético que se desangraba sin remedio en la Copa. El equipo madrileño sigue vivo en la competición por su ariete y por la renuncia de Osasuna a adueñarse del partido en el segundo tiempo.

Javier Aguirre, con su peculiar estilo expositivo, aseguró la víspera del encuentro conformarse con "jugar un poco la pelota". Así, su equipo se liberaría de las ansiedades que, supuestamente, le produce el Calderón. Nadie escuchó sus deseos. Desde...

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Fernando Torres, gracias a un soberbio gol cuando su equipo estaba jugando fatal y además tenía un futbolista menos, le hizo un torniquete de urgencia a un Atlético que se desangraba sin remedio en la Copa. El equipo madrileño sigue vivo en la competición por su ariete y por la renuncia de Osasuna a adueñarse del partido en el segundo tiempo.

Javier Aguirre, con su peculiar estilo expositivo, aseguró la víspera del encuentro conformarse con "jugar un poco la pelota". Así, su equipo se liberaría de las ansiedades que, supuestamente, le produce el Calderón. Nadie escuchó sus deseos. Desde luego, sus futbolistas no. El Atlético amasó otro partido infumable. Un problema que habrá que empezar a achacar a la falta de capacidad de su medio campo para generar fútbol.

ATLÉTICO DE MADRID 1 - OSASUNA 1

Atlético: Cuéllar; Perea, Pablo, Ze Castro, Antonio López; Costinha, Luccin; Mista (Gabi, m. 71), Jurado; Agüero y Fernando Torres. No utilizados: Falcón, Seitaridis, Pernía, Valera, Galletti y Azcárate.

Osasuna: Ricardo; J. Flaño, Cuéllar, M. Flaño, Monreal; Nekounam; D. López, Raúl García, Font, Juanlu (Muñoz, m. 68); y Webó (Romeo, m. 79). No utilizados: Elía, Izquierdo, Soldado, Milosevic, Puñal y Juanfran.

Goles: 0-1. M. 36. Webó empuja un centro de Flaño. 1-1. M. 73. Torres controla con la interior de la bota y marca por la escuadra desde el pico del área.

Árbitro: Iturralde González. Amonestó a Monreal, Juanlu y R. García . Expulsó a Pablo (m. 47)

Unos 10.000 espectadores en el Calderón.

El conjunto madrileño lleva toda la temporada partido en dos. La mitad de atrás, con la salvedad de algún que otro despiste escandaloso -por ejemplo, el gol de Webó ayer- aguanta más o menos el tipo. La mitad superior, los delanteros, no termina de aprovechar sus oportunidades, pero tanto Torres como Agüero se las apañan para crear ocasiones sin la colaboración de nadie. Ni siquiera se ayudan mucho entre ellos, aunque las mejores jugadas del choque fueron un pase en profundidad del madrileño al argentino que éste desaprovechó solo ante Ricardo y una fantástica jugada individual de Agüero que acabó con un cabezazo de Torres que detuvo Ricardo.

El verdadero problema del Atlético es su centro del campo. Da igual la combinación. Lo mismo aporta Gabi, que Luccin, que Costinha o Jurado. Ninguno es una nulidad. Todos, individualmente, cumplen mal que bien con su cometido. Sin embargo, son incapaces de elaborar el juego, de aliarse entre sí y con los demás. La distancia con los delanteros es enorme. Las bandas, aunque sean tan postizas como ayer -Mista y Jurado- no colaboran.

Osasuna, trabajado desde hace cuatro años por el actual técnico rojiblanco, es un equipo discreto. Nadie es un virtuoso, pero toda la maquinaria está pensada para que ruede con fluidez hasta el área contraría. Y, a veces, lo consiguen. Aunque sin excesos, claro. Tampoco les hacía falta.

El Atlético consiguió acercarse al área de Ricardo gracias a la complicidad del conjunto navarro. A pesar de su superioridad, Osasuna fue reculando y regalando terreno. Una invitación a que surgiera el orgullo de Torres.

Fernando Torres celebra su excelente gol del empate atlético.EFE

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