Solidarios

Jueves por la noche. Mientras Antena 3 perpetraba la gala solidaria más bochornosa de estas navidades (La noche de los inocentes) y de toda la temporada televisiva, La Primera de TVE seguía intentando estirar el programa más lamentable de las celebraciones de su muy nostálgico cincuentenario (La imagen de tu vida).

Tardé mucho tiempo en entender que el teletón de la cadena de Planeta y DeAgostini presentado por Juan y Medio para recaudar donativos en favor de los niños con cáncer, "esos héroes anónimos", iba en serio, que no era una inocentada propiamente dicha, por...

Jueves por la noche. Mientras Antena 3 perpetraba la gala solidaria más bochornosa de estas navidades (La noche de los inocentes) y de toda la temporada televisiva, La Primera de TVE seguía intentando estirar el programa más lamentable de las celebraciones de su muy nostálgico cincuentenario (La imagen de tu vida).

Tardé mucho tiempo en entender que el teletón de la cadena de Planeta y DeAgostini presentado por Juan y Medio para recaudar donativos en favor de los niños con cáncer, "esos héroes anónimos", iba en serio, que no era una inocentada propiamente dicha, porque el formato parecía una patosa parodia de esas galas solidarias que de vez en cuando intentan tranquilizar nuestras conciencias si llamamos a un 902. Era todo tan ridículo, caricaturesco y patético, desde los presentadores hasta esa centralita con media docena de famosos / graciosos, que pensé que no podía ser verdad; que por fin Antena 3 se había contagiado con el humor de Buenafuente. Cuando supe que aquello iba en serio, cuando los donativos llegaron al millón de euros después de aguantar las bromas blancas estilo Inocente, inocente a costa de nuestro gran portero de balompié (la partida de mus entre Casillas y el Lobo disfrazado), entonces supe que me habían tomado el pelo durante hora y pico (soy lento de reflejos) y que aquella gala iba en serio.

Lo que no entendí de ninguna manera fue la repetición por La Primera del zapping de La imagen de tu vida después que se supo que el gran concurso del cincuentenario había sido ganado por el videoclip de las espontáneas manifestaciones de Ermua, seguido de los dibujos animados de la familia Telerín, la matanza del 11-M, la agonía de la niña colombiana Omaira, las torres de Nueva York y la dimisión de Adolfo Suárez.

Miren ustedes: si éste es el ranking de las imágenes de nuestra vida, sólo cabe concluir que nuestras imágenes caseras siguen siendo dictadas y controladas por los sabios comunicólogos del Opus Dei y los muy astutos spin doctors de FAES, aunque todo sea lo mismo.