Más difícil todavía

Malos augurios para los planes de clasificación de España para la Eurocopa de 2008, que no se pierde una cita de tal calibre desde Suecia 92. Entonces el contacto con los escandinavos le provocó una urticaria. Esta vez la cosa se complica, porque a Islandia se le juntan Dinamarca, con ganas de revancha desde el partido en Sevilla que le eliminó del Mundial de EE UU 94, y la consabida Suecia.

Islandia y Suecia (1-2) intercambiaron golpes muy rápido, pero los suecos salieron mejor parados. Vidarsson adelantó a los isleños con un trallazo rápido que pilló desprevenido a Shabaan. La alegría...

Malos augurios para los planes de clasificación de España para la Eurocopa de 2008, que no se pierde una cita de tal calibre desde Suecia 92. Entonces el contacto con los escandinavos le provocó una urticaria. Esta vez la cosa se complica, porque a Islandia se le juntan Dinamarca, con ganas de revancha desde el partido en Sevilla que le eliminó del Mundial de EE UU 94, y la consabida Suecia.

Islandia y Suecia (1-2) intercambiaron golpes muy rápido, pero los suecos salieron mejor parados. Vidarsson adelantó a los isleños con un trallazo rápido que pilló desprevenido a Shabaan. La alegría le duró dos minutos al equipo local, cuando Källström emuló a Vidarsson, con un gol de calco, sólo que en el arco contrario. Wilhelmsson sentenció la partida. Aunque ganó, Suecia notó la ausencia de tres de sus cuatro medios titulares ante España. En especial la de Ljungberg, lesionado desde entonces. Svensson no pisó el campo por sanción, mientras que Linderoth, el mismo que sacó bajo la cal un cabezazo de Puyol, se quedó con su esposa en Copenhague, a punto de dar a luz.

Tampoco llegaron buenas noticias desde Vaduz. Como era de esperar, Dinamarca solventó de un plumazo su visita a Liechtenstein (0-4). A la media hora ya vencía por dos goles, obra de Jensen y Gravgaard. Tomasson, en dos ocasiones, marcó recién iniciado el segundo tiempo. El cuadro del sempiterno Morten Olsen se conformó con la ventaja y, pese a la decepción provocada por el empate con Irlanda del Norte, echó el freno de mano en la segunda parte. Irlanda del Norte, por su parte, añadió dramatismo a la jornada tras ganar a Letonia, con acierto de Healy, en su fortín de Windsor Park.

Si Luis Aragonés atraviesa un mal momento, Steve McLaren, que sigue sin encontrar la tecla para dirigir a Inglaterra, le sigue a la zaga. Los británicos hicieron el ridículo en Zagreb (2-0). Si ya el empate sin goles en Old Trafford, en el mismísimo teatro de los sueños, con una Macedonia muy trabajadora y poco más, la derrota de anoche pone en aprietos al sucesor de Sven Göran Ericksson en el banquilo. Da Silva abrió la lata mediado el segundo tiempo y Gary Neville contribuyó al desastre británico con un tanto en propia meta. Robinson no acertó a despejar una cesión del lateral.

El resto de las selecciones potentes cumplió el trámite. Italia solventó su visita a Georgia (1-3), con dianas de tres de sus centrocampistas: De Rossi, Camoranesi y Perrotta. Ucrania, desahuciada el fin de semana en el Olímpico de Roma, recuperó el aliento en el grupo B con su victoria sobre Escocia. El primer gol vino de un libre directo de Shevchenko, que su paisano Kucher embocó entre una maraña de hombres en el área chica. El propio Shevchenko anotó el penalti que le provocaron en el tiempo de descuento. El goleador del Chelsea forzó la primera derrota de los escoceses -y la expulsión de su capitán, Steve Pressley-, que llegaron encorajinados a Kiev tras sumar todos los puntos posibles, nueve, y tan solo un gol en contra.

Francia se desquitó de la afrenta sufrida hace cinco días en Escocia, donde cayó por la mínima, y firmó la goleada del día (5-0). Lo tenía fácil: las islas Feroe no suponen un quebradero de cabeza. Turquía arrolló a Moldavia con idéntico resultado.

Donde la vida trascurre con esperanzas de cambio es en Serbia. Javier Clemente mantiene el primer puesto del grupo A tras batir con comodidad a Armenia (3-0). Lejos queda la imagen errática de los balcánicos en el Mundial de Alemania, donde cerraron la clasificación. La alegría también volvió a Rusia. Después de dos empates ante Croacia e Israel, la escuadra que dirige Guus Hiddink sudó para vencer a Estonia (2-0).

Malta protagonizó para bien por fin un partido. Schembri, con dos goles a Hungría (2-1), pasó a la historia del diminuto archipiélago, que hacía 24 años que no saboreaba la victoria en un partido de clasificación para el Europeo. La anterior ocasión data de 1982, cuando superó a Islandia en la ciudad italiana de Messina. Entonces fue en campo neutral. Ayer, al menos, los malteses lo pudieron festejar.