Reportaje:

Ronaldo se queda en el Madrid

El Inter rechaza la oferta del club blanco para efectuar un trueque por Adriano

Los esfuerzos entre el Inter y el Madrid por intercambiarse a Ronaldo y Adriano resultaron baldíos. Ayer a las 19.00 horas se cerró el plazo de inscripción de jugadores en Italia sin que Adriano se moviera de Milán ni Ronaldo interrumpiera los preparativos para la barbacoa que tenía previsto engullir en su casa de Madrid en compañía de unos amigos.

A Ronaldo nunca le entusiasmó la idea de regresar a su ex club, del que se marchó en 2002 señalado como traidor por una parte de la afición. El delantero madridista cree que en Madrid ha encontrado su espacio ideal. Sin embargo, no termina de...

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Los esfuerzos entre el Inter y el Madrid por intercambiarse a Ronaldo y Adriano resultaron baldíos. Ayer a las 19.00 horas se cerró el plazo de inscripción de jugadores en Italia sin que Adriano se moviera de Milán ni Ronaldo interrumpiera los preparativos para la barbacoa que tenía previsto engullir en su casa de Madrid en compañía de unos amigos.

A Ronaldo nunca le entusiasmó la idea de regresar a su ex club, del que se marchó en 2002 señalado como traidor por una parte de la afición. El delantero madridista cree que en Madrid ha encontrado su espacio ideal. Sin embargo, no termina de confiar en Fabio Capello, su técnico, que le transmite una indisimulable falta de fe. Estas dudas llevaron a Ronaldo a evitar las declaraciones públicas a la espera de acontecimientos. Puesto que Capello prefiere la capacidad aeróbica de Adriano, de 24 años, a la economía de gestos de Ronaldo, de 30, el Madrid se dispuso a intentar un trueque que al final se hizo imposible.

El Atlético piensa exigir a Reyes tres millones de indemnización por incumplir su acuerdo de recalar en el Calderón

El Inter sólo aceptaba a Ronaldo en calidad de cedido y además pedía al Madrid diez millones de euros por ceder a Adriano. La incompatibilidad de pretensiones entre los clubes fue total. El Madrid buscaba una fórmula definitiva. Sólo aceptaba traspasar a Ronaldo y comprar a Adriano, sin cesiones probatorias, y además exigía al club italiano el pago de diez millones de euros por la diferencia de precio que cree que existe en favor de Ronaldo. El término del plazo de fichajes sorprendió a los dos clubes limando diferencias. Ahora Capello y Ronaldo deberán aprender a trabajar juntos.

La negociación entre el Inter y el Madrid comenzó el miércoles por la noche, cuando el club de Chamartín logró un acuerdo para ceder a Baptista al Arsenal a cambio de Reyes. Con este pacto el Madrid pasó a disponer de la plaza de extranjero que ocupaba Baptista y se puso manos a la obra para intentar la contratación de Adriano, que es brasileño.

Las conversaciones entre el Arsenal y el Madrid, que desde hacía tres semanas no prosperaban, se encauzaron al tiempo que se abría una vía negociadora entre Chamartín y el palacio Durini, sede del Inter. La actividad en las oficinas del Bernabéu no cesó durante toda la noche del miércoles. Los dirigentes madridistas adquirieron a Reyes, de 23 años, en calidad de cedido a cambio de ceder a Baptista hasta junio de 2007. A partir de junio, cuando concluya la actual temporada, Baptista pasaría a formar parte del Arsenal y Reyes sería incorporado al Madrid a todos los efectos, como traspasado.

Esta fórmula, un arabesco jurídico que esconde un traspaso, tiene como objeto permitir a Reyes jugar en el Madrid a partir de ahora sin necesidad de firmar una transferencia que le suponga romper el compromiso adquirido con el Atlético, al que se obligó personalmente a pagar tres millones de euros de indemnización en caso de fichar por otro club al salir del Arsenal. Ayer Reyes rompió su palabra y en el Atlético lamentaron que lo hiciera sin avisarles primero.

"Hace dos semanas el Madrid le dijo no a Reyes porque ya no le interesaba", lamentó un dirigente del Atlético a este periódico; "Ramón Calderón repitió que no contaba con Reyes y Reyes repitió que estaba loco por fichar por el Atlético. A raíz de eso actuamos como actúan los clubes de buena fe: llamamos al jugador y le hicimos una oferta al Arsenal [16 millones en efectivo y otros cuatro aplazados y condicionados], pero el Arsenal, que se había comprometido a contestarnos, no lo hizo. Reyes tampoco".

Lo primero que hizo Reyes cuando se incorporó a la concentración de la selección española, el lunes pasado, fue repetir que estaba "loco" por fichar por el Atlético. Ayer, una vez roto lo que en el club del Manzanares consideran un acuerdo privado, el delantero sevillano cambió de discurso y pasó a la defensiva: "Son cosas que pasan en el mundo del fútbol. Suenas para varios equipos y al final acabas en uno (...). El Atlético de Madrid no tiene que sentir una traición".Ayer en el Atlético aseguraban con rotundidad que, independientemente de la ingeniería jurídica que despliegue el Madrid para evitar que se exijan responsabilidaes a Reyes, reclamarán al futbolista "tres millones de euros" por deshacer el contrato que firmó en privado. Este acuerdo, aparentemente formalizado al margen del Arsenal, no está amparado por la normativa de la FIFA. Sin embargo, desde el Manzanares avisaron al representante del jugador que "por su bien" le convenía pedirle ese dinero al Madrid porque de otro modo debería pagarlo Reyes "de su bolsillo".

Reyes, a la izquierda con el Arsenal, y Ronaldo.REUTERS / ULY MARTÍN

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