175 kilómetros de peaje para descongestionar la A-3
La AP-36, que une Ocaña y La Roda, se abre hoy a las tres de la tarde
La autopista AP-36, la alternativa de peaje a la A-3, que une Madrid con Valencia, Alicante y Murcia, levanta hoy las barreras. El tramo de Ocaña a Atalaya del Cañavate (Cuenca) tiene 150 kilómetros, y el que conecta con La Roda (Albacete), 145. Los conductores que utilicen la autopista hacia Valencia y los que circulen por el tramo que une con Murcia pagarán un máximo de 12,55 euros. La vía quedará abierta a las tres de la tarde.
La Guardia Civil recorrerá desde primera hora de la mañana de hoy todo el trazado de la autopista para comprobar que está en perfectas condiciones. Una vez he...
La autopista AP-36, la alternativa de peaje a la A-3, que une Madrid con Valencia, Alicante y Murcia, levanta hoy las barreras. El tramo de Ocaña a Atalaya del Cañavate (Cuenca) tiene 150 kilómetros, y el que conecta con La Roda (Albacete), 145. Los conductores que utilicen la autopista hacia Valencia y los que circulen por el tramo que une con Murcia pagarán un máximo de 12,55 euros. La vía quedará abierta a las tres de la tarde.
Circular por la AP-36 costará hasta 12,55 euros para los coches en temporada alta
La Guardia Civil recorrerá desde primera hora de la mañana de hoy todo el trazado de la autopista para comprobar que está en perfectas condiciones. Una vez hecho este trámite se abrirán las salidas, primero, y las entradas, después, para los primeros conductores de peaje entre Madrid y la costa levantina. Esto sucederá alrededor de las tres de la tarde, cinco meses y medio antes de lo previsto en un principio. Las obras comenzaron en febrero de 2005.
La sociedad concesionaria, liderada por Cintra, filial de Ferrovial, explicó ayer que con esta infraestructura quiere ofrecer a los coductores la posibilidad de soslayar los atascos de la A-3, y rentabilizar los 565 millones que ha invertido. "Estamos convencidos de que se descongestionará la autovía A-3", aseguró ayer Javier Pérez Fortea, consejero director general de la nueva infraestructura, consistente en dos autopistas, la AP-36 y la A-43. Ambas vías transcurren íntegramente por Castilla-La Mancha.
En el caso del itinerario Madrid-Valencia, el trayecto aumenta en 35 kilómetros, hasta el enlace con la A-3 en Atalaya del Cañavate. Alicantinos y murcianos, que utilizan la N-301 a partir de La Roda para llegar a Madrid en los días de atasco en la A-3, podrán tomar la nueva autopista a partir de hoy con una reducción de tres kilómetros. Entre Madrid y Ocaña se puede viajar gratuitamente por la A-4 o tomar la R-4, de peaje, a un precio para los coches de 6,80 euros en hora punta o de 3,40 en los periodos de transición.
El recorrido completo, de 175 kilómetros, es de pago en 120 kilómetros, a un precio total de 12,55 euros en temporada media y alta y para vehículos ligeros (10,80 en temporada baja). Los 55 kilómetros gratuitos corresponden al tramo final de la AP-36 hasta La Roda y a la A-43 en su totalidad. Además, se harán descuentos por recorridos de ida y vuelta completos; a los usuarios habituales; a los que utilicen la Via-T, y a los residentes con familia numerosa, mayores de 65 años y menores de 26.
Los descuentos serán acumulativos, según señala la sociedad Cintra, que invoca una reducción de hasta el 56%. Para lograrlo, una persona tiene que conducir su vehículo en temporada baja durante 21 o más viajes mensuales, utilizar el telepago, ser residente con familia numerosa y pocos ingresos, y estar por encima o por debajo del tramo de edad con derecho a rebaja.
Cintra (filial de Ferrovial y con un 50% de participación en la sociedad concesionaria), Europistas (40%), Budimex (5%) y Kutxa (5%) han gastado 565 millones de euros para poner en marcha la nueva autopista. "La inversión se recuperará dentro de muchos años", dijo ayer Pérez Fortea. La concesión de la autovía, adjudicada en 2004 cuando Francisco Álvarez-Cascos era ministro de Fomento, finalizará en febrero de 2040, prorrogable un máximo de 4 años si se cumplen determinados criterios de calidad.
Javier Martín, gerente de la concesión, estima que un 20% del tráfico en el corredor del Levante optará por el peaje. En términos absolutos, dijo Martín, suponen 7.000 vehículos diarios en días normales y entre 15.000 y 20.000 los festivos. Precisamente, mañana comienza una de las grandes operaciones de tráfico del verano, la primera prueba para la AP-36. Martín no teme complicaciones en el estreno. "Tenemos capacidad para el triple del tráfico esperado", aseguró. La autovía A-3 fue utilizada por 69.437 vehículos el 15 de agosto de 2005, uno de los días en que más tráfico soportó.
La autopista supondrá, según Cintra, la creación de 100 nuevos empleos en el área de influencia de esta carretera, que pasa por los municipios de Villatobas, Corral de Almaguer, Quintanar de la Orden, Mota del Cuervo y Las Pedroñeras.
En la construcción de la infraestructura han sido empleados hasta 3.000 obreros en los momentos de más actividad. Estos trabajadores han utilizado 2,2 millones de toneladas de mezclas bituminosas para asfaltar la autopista y han tenido que remover 44 millones de metros cúbicos de tierra. La AP-36 es la primera autopista que se abre al tráfico de las cuatro últimas adjudicadas por el Gobierno.