Un niño muerto y seis heridos al volcar un autobús escolar

Un niño de 13 años, David Álvarez Otero, perdió la vida y otros seis resultaron heridos tras chocar con una furgoneta y precipitarse por un terraplén el autocar escolar que los transportaba. En el siniestro, ocurrido a las 7.45 a unos 11 kilómetros de Oviedo, también resultaron heridos el conductor del autobús, de 24 años, y los dos ocupantes de la furgoneta, de 32 y 35 años. En el vehículo escolar viajaban siete estudiantes de Enseñanza Secundaria, con edades comprendidas entre los 13 y los 17 años.

El accidente se produjo en una carretera rural, muy estrecha y pendiente, entre la loca...

Un niño de 13 años, David Álvarez Otero, perdió la vida y otros seis resultaron heridos tras chocar con una furgoneta y precipitarse por un terraplén el autocar escolar que los transportaba. En el siniestro, ocurrido a las 7.45 a unos 11 kilómetros de Oviedo, también resultaron heridos el conductor del autobús, de 24 años, y los dos ocupantes de la furgoneta, de 32 y 35 años. En el vehículo escolar viajaban siete estudiantes de Enseñanza Secundaria, con edades comprendidas entre los 13 y los 17 años.

El accidente se produjo en una carretera rural, muy estrecha y pendiente, entre la localidad de Santa Eulalia de Morcín y el Alto de Pedroveya, cuando el autocar que cada día recorre las poblaciones de esta zona montañosa para recoger a los estudiantes que cursan Enseñanza Secundaria en Oviedo, trató de evitar el impacto con la furgoneta, que circulaba en sentido contrario.

A resultas de la maniobra de la evasión, y probablemente por la humedad existente en la calzada a causa del rocío de la noche, el transporte escolar, que circulaba en sentido descendente, se deslizó tras impactar con la furgoneta y acabó saliendo de la calzada por la margen izquierda, precipitándose por un desnivel de ocho metros.

Según la empresa del autocar, el conductor logró frenar el vehículo en un primer momento, pero perdió su control y ya no pudo enderezarlo. El bus tiene seis años de antigüedad y había superado las revisiones reglamentarias, pero no estaba equipado con cinturones de seguridad, que sólo son obligatorios para autocares de nueva construcción.

Cinco de los estudiantes, que resultaron heridos leves, fueron evacuados al hospital más próximo, el Álvarez-Buylla, de Mieres, donde fueron dados de alta tras ser asistidos. El conductor del transporte escolar, los dos ocupantes de la furgoneta y los dos niños heridos de mayor gravedad fueron trasladados al Hospital Central de Asturias, en Oviedo, donde falleció la única víctima mortal del siniestro, David Álvarez Otero, de 13 años, hijo único, estudiante del Instituto Doctor Fleming, de Oviedo, y vecino de la localidad de Piñera (Morcín). El óbito de la única víctima mortal sobrevino varias horas después de llegar al hospital, tras fracasar los intentos de reanimación realizados por los equipos médicos.

Al adolescente fallecido le había sido diagnosticado politraumatismo, fractura-estallido de pelvis y traumatismo abdominal con rotura de vísceras abdominales y había ingresado en el hospital en situación de choque hipovolémico. El Ayuntamiento de Morcín declaró luto oficial en el municipio.

Una niña de 14 años, Alba M. I., que hubo de ser extraída del vehículo por los bomberos de Mieres y La Morgal, sufre traumatismo en el brazo izquierdo, herida inciso-contusa en hombro y herida en codo y brazo izquierdo. Y José Miguel R. F., de 32, ocupante de la furgoneta, padece traumatismo cervical y policontusiones. El pronóstico de ambos es reservado y ayer por la tarde permanecían hospitalizados.

Éste es el tercer accidente grave, todos ellos con víctimas mortales, protagonizados por autocares en Asturias este año. En enero, dos mujeres perdieron la vida y otros 12 viajeros sufrieron heridas de diversa consideración al volcar un vehículo de servicio regular entre Galicia y Asturias cuando recorría el último tramo descendente de la autopista de alta montaña A-66, en el municipio asturiano de Lena. También en Lena perdieron la vida en abril dos niños y dos monitores de un grupo de boy scouts tras volcar en la autovía del Caudal el autocar en el que regresaban a Gijón procedentes de un campamento de la provincia de León.

El de ayer es el quinto siniestro de importancia protagonizado en los últimos ocho años por transportes escolares en Asturias. El más grave se produjo el 17 de noviembre de 1998 en Buelna (Llanes) cuando siete estudiantes de la localidad de Colombres (Ribadedeva) perdieron la vida y otros seis resultaron graves tras colisionar el autocar escolar con un camión.