Reportaje:

Cómo ganar un segundo a Schumacher

Pat Symonds, jefe de ingenieros de Renault, elogia a Alonso y el trabajo en 'boxes', decisivo para vencer en el GP de Bahrein

La victoria de Fernando Alonso en el Gran Premio de Bahrein, que abrió el curso de la fórmula 1, desató la euforia de Renault. A los dos títulos conseguidos en 2005, el de pilotos y el de constructores, la escudería francesa agrega ahora un primer triunfo esperanzador que demuestra el buen trabajo realizado durante los meses de invierno. Fue gracias a todo ello que el español, el campeón mundial más joven de la historia, pudo ascender al peldaño más alto del podio.

Pero todo podría haberse frustrado de no ser por el acierto en la táctica y la excelente labor del equipo en el segundo rep...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La victoria de Fernando Alonso en el Gran Premio de Bahrein, que abrió el curso de la fórmula 1, desató la euforia de Renault. A los dos títulos conseguidos en 2005, el de pilotos y el de constructores, la escudería francesa agrega ahora un primer triunfo esperanzador que demuestra el buen trabajo realizado durante los meses de invierno. Fue gracias a todo ello que el español, el campeón mundial más joven de la historia, pudo ascender al peldaño más alto del podio.

Pero todo podría haberse frustrado de no ser por el acierto en la táctica y la excelente labor del equipo en el segundo repostaje en el que Alonso invirtió 1,1 segundos menos que Michael Schumacher, que salió menos cargado de gasolina que el piloto español. "Nuestra estrategia fue perfecta", aseguró ayer Pat Symonds, jefe de ingeniería de Renault, que reconoció el error que habían cometido con el coche del italiano Giancarlo Fisichella, que salió con 50CV menos y se retiró por problemas hidráulicos. "Los mecánicos mantuvieron el aplomo ante el momento que estaban viviendo. Estuvieron extraordinarios y permitieron que Alonso ganara. Eso es una muestra más de hasta donde podemos llegar esta temporada", comentó.

"Había que llenar algo más el depósito para dar más vueltas que los demás y tener menos tráfico antes del repostaje"

La segunda entrada de Alonso en los boxes resultó crucial para el desenlace de la carrera. El asturiano lo hizo tres vueltas después que Schumacher, lo que le permitió cambiar los neumáticos -lo que menos tiempo lleva- y cargar menos el tanque de gasolina. Ello le ahorró un segundo en relación con el alemán y le mantuvo igual de competitivo porque su coche iba tan vacío como el de Schumacher en el momento en el que los dos se encontraron en la salida del pit-lane. Alonso resistió entonces el ataque de Schumacher, le obligó a desplazarse hacia la parte exterior de la curva, le superó y ya encabezó la prueba hasta la conclusión.

"Habíamos marcado la estrategia de llenar algo más el depósito antes de la clasificación para así poder dar más vueltas que los demás y aprovechar la ausencia de tráfico en las momentos previos al repostaje", explicó Symonds; "la verdad es que acertamos de lleno aprovechando la circunstancia de que Michelin [las gomas] es más resistente que Bridgestone. Y Alonso realizó una carrera increíble, sin errores, como de costumbre, y demostró la calidad que atesora. Es un piloto que roza la perfección".

Sin embargo, Schumacher se quejó de que los comisarios no habían contabilizado su última vuelta en la clasificación y que ello le impidió cargar 2,5 litros menos de combustible. "Fue un error que pagué porque, con una vuelta más, a lo mejor Alonso no me habría superado", se lamentó.

En Bahrein se disipó cualquier duda que pudiera existir sobre la influencia del contrato que Alonso tiene firmado con McLaren-Mercedes para la próxima temporada. "Siempre he sabido que daría lo mejor de sí mismo", reiteró Flavio Briatore, director de la escudería francesa. Está claro que si Renault quiere rentabilizar su inversión en la fórmula 1 deberá confiar en el ovetense a fondo y ofrecerle lo mejor de sus evoluciones -ayer se supo que Patrick Faure, el presidente de Renault F-1, se jubiló a sus 59 años y que será sustituido por Alain Dassas, actual director de los servicios financieros-. "Somos muy fuertes, pero no podemos quedarnos parados", añadió Alonso; "hay cuatro escuderías que aspiran a las victorias y necesitamos que el coche vaya evolucionando constantemente".

La carrera de Bahrein demostró que, en efecto, la distancia entre Renault, McLaren, Ferrari y Honda es mínima. Y lo más probable es que en Malaisia, el próximo domingo, vuelva a quedar patente. "Tenemos unos buenos neumáticos [en relación a Michelin], pero es posible que Bridgestone funcione mejor con el calor malayo. Y cabe esperar que [el finlandés Kimi] Raikkonen no tendrá problemas y, por tanto, estará luchando por la victoria", sentenció Alonso, que el año pasado se impuso en la cita de Sepang.

Archivado En