Reportaje:

Adiós 2005, hola 2006

Madrid despide el año con fiestas de todos los estilos y en locales de distinto aforo, que incluso pueden reservarse por Internet

En un pequeño club de jazz, o en una macrodiscoteca. Con todo el glamour de los trajes de etiqueta, o vestidos en plan bohemio; con músicos en directo o con la música enlatada, todo vale para recibir al nuevo año. Centenares de locales de todo Madrid y su comunidad se disponen a celebrar la Nochevieja de la manera que mejor saben o más les apetece. Hay para todos los gustos, con la consolidación de Internet en el intercambio de información y compraventa de entradas para las distintas fiestas.

Desde las multitudinarias de Fuenlabrada o Madrid hasta las más íntimas del Siroco, Populart o ...

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En un pequeño club de jazz, o en una macrodiscoteca. Con todo el glamour de los trajes de etiqueta, o vestidos en plan bohemio; con músicos en directo o con la música enlatada, todo vale para recibir al nuevo año. Centenares de locales de todo Madrid y su comunidad se disponen a celebrar la Nochevieja de la manera que mejor saben o más les apetece. Hay para todos los gustos, con la consolidación de Internet en el intercambio de información y compraventa de entradas para las distintas fiestas.

Desde las multitudinarias de Fuenlabrada o Madrid hasta las más íntimas del Siroco, Populart o Gruta 77, la Nochevieja sirve para despedir el año y recibir el nuevo como mejor le apetezca a cada cual, casi siempre teniendo en cuenta que muy pocas de las grandes fiestas programadas para tan señalada noche bajan de los 60 euros, y que siempre suele estar está garantizado el cotillón, la barra libre, y unos churritos bien entrada la madrugada.

Por parte de la normativa vigente al respecto, en todas las grandes fiestas que prevén acoger miles de asistentes se exige un amplio dispositivo de seguridad que vigile todas las instalaciones constantemente, incluidos roperos, cuartos de baños y pasillos. Además, un servicio médico debe permanecer alerta a incidentes e intoxicaciones.

- 'DISC JOCKEYS' AL MANDO. La música electrónica, servida por afamados DJ es lo que se lleva desde hace ya unos años. Destacan la que se organiza en Fabrik de Fuenlabrada (Av. Industria, 82. 60 Euros), en Pachá (Barceló, 11. 40 Euros: dos copas) o en Kapital (Atocha 105. 60 Euros). El house y el sonido Ibiza priman en este tipo de fiestas, que habrán comenzado justo después de tomar las uvas de la suerte, y en las que van a comenzar ya amanecidos, cuando las otras empiezan a cerrar.

Entre las que abren sus puertas ya bien entrado el primer día del año nuevo está Empire (Recoletos, 16. 20 euros copa), con Juanjo Martín a los platos; Heineken (antigua sala Arena: Princesa, 1. 16 euros con copa) con una sesión Low con Elesbaan y UNDO entre los pinchas; La Riviera (Pº bajo Virgen del Puerto s/n. 30 euros copa) con una fiesta que comienza a las 9 de la mañana y concluye a las once de la noche; y, por supuesto, la que se hace en Macumba (Estación Chamartín), bajo la denominación de Space Of Sound, con un trío de estrellas en la cabina: Ismael Rivas, Javier González y Luis Damora.

- 'HOUSE' Y PETARDEO. Con la música house por bandera destacan las fiestas de Divino Aqualung (Ermita del Santo, 43) con una sesión de noche y otra matinal desde la siete de la mañana; la tradicional y veterana del Círculo de Bellas Artes (Alcalá, 42), las cosmopolitas de Keeper (Juan Bravo, 31), Dido (antes Ciao Madrid, en López de Hoyos, 25) y La Notte (Joaquín María López, 74); las más vanguardistas de MOMA (José Abascal, 56) y Ave Nox (Lagasca, 31), conocida hasta hace poco como La Posada de las Ánimas, que adquirió mucha fama por el petardeo de la fiesta del año pasado; las siempre chics de Tiffany's (Dr. Arce, 11) y Archy (Marqués de Riscal, 11); Ananda (Estación de Atocha) con su toque asiático; la mundana Living (Av. Brasil, 5) rodeada de otras salas de conciertos; Négone (Capitán Haya, 1), para los aficionados a La Fuga y otros juegos virtuales; la céntrica Joy Madrid (Arenal, 11), Alegoría (Villanueva, 2), la moderna Liberata (Alberto Alcocer, 43), que intercalará la música de la cabina con la de su propia banda de directo, Liberata Band; Anymus, el nuevo local de moda recién inaugurado en la Plaza de España; o Locos Por El Fútbol, otra sala grande reciente erigida en el complejo de ocio de la Estación de Príncipe Pío.

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En casi todas estas fiestas se exige media etiqueta: traje de noche (largo o corto) para ellas, y chaqueta y corbata (sin vaqueros ni zapatillas), para ellos.

- JUERGAS POR INTERNET. Este año, en mitad de una sosa década a la que aún no se le ha puesto nombre, no hay un denominador común que inspire las diversas fiestas, tal y como pasó, por ejemplo, con el concepto Millenium en las nocheviejas de 1999, 2001 y 2001, que se disputaron la despedida o inicio de década, siglo y milenio. A cambio, multitud de páginas web han servido para relacionar la ingente lista de celebraciones de adiós al 2005 y hola al 2006 que se organizan no sólo en la capital y alrededores.

Se ha creado un intercambio de opiniones entre internautas para explicar cuáles son sus favoritas y recomendables, según las experiencias de otros años, además de tiendas virtuales para venta de entradas y vales descuentos entre particulares, por encima incluso de las propias empresas organizadoras de las fiestas.

www.salirdecopas.com, www.fiestas-de-madrid.com y www.nocheviejamadrid.com son algunas de estas empresas en Internet, donde se ha llegado también a revender entradas ya agotadas oficialmente o que quedan libres por surgirle a alguien algún otro compromiso.

- ROCK Y JAZZ. Hay fiestas de Nochevieja que se montan en espacios más pequeños, con músicos de carne y hueso tocando y donde se puede ir vestido como a cada cual le dé la gana, siempre y cuando no se alteren las lógicas normas del decoro y el respeto.

En el Gruta 77 (Nicolás Morales, esquina calle de Cuchillo), la Nochevieja se hace rockera merced a las actuaciones de Los Chicos, el grupo que nombró Beck como su favorito español, y Rojo Omega y su rock que bebe tanto de Los Ramones como de AC/DC. Cuesta 12 euros, empieza a la una de la madrugada y terminará hacía las nueve de la mañana, con una selección especial musical a cargo de DJ Indio después de los conciertos. El Siroco (San Dimas, 3) asegura una noche glam con Furor, el grupo inventor del rock perra, por 20 euros que dan derecho al concierto y a dos copas.

El guitarrista Amar Sundi y el armonicista Ñaco Goñi con su banda, prometen estar dándole al blues eterno desde las 12.30 de la noche hasta las siete de la mañana, en Populart (Huertas, 22). Sólo se cobrarán los suplementos de consumición habituales, mientras que el Bogui Jazz (Barquillo, 29) apela a la fe en el local, pues anuncian una sorpresa jazzística para toda la Nochevieja sin adelantar ningún nombre.

Además, hay fiestas de despedida y bienvenida de año en conocidos locales de aforo mediano, como Galileo Galilei (Galileo, 100), Clamores (Alburquerque, 14), Cats (Julián Romea, 4), Ricorda (Guzmán el Bueno, 98), Tempo (Duque de Osuna, 8), Shabay (Miguel Ángel, 3), Tantra (Castellana, 40), Cool (Isabel la Católica, 6), Serrano 41 o el reabierto Caracol (Bernardino Obregón, 18), con todas sus licencias en regla.

- JÓVENES Y FLAMENCOS. Hay también apuestas más juveniles, como la de Planet Hollywood (Pza. Cortes, 7) o La Botellita de Serrano (Serrano 63), de ambientes más universitarios; y hasta flamencas, como la de Las Tablas (Pza. España, 9) con Juan Fernández y el cuadro Las Tablas, o la del Cardamomo (Echegaray, 15) con buen flamenquito enlatado hasta altas horas de la madrugada.

El año 2005 ha terminado, y empieza uno nuevo con muchos retos por delante en cuanto a garitos musicales se refiere. La salud de la cultura madrileña, con tanto talento musical escondido en bares y locales de ensayo esperando su momento para darse a conocer, está en juego.

Que recibirlo con música grabada o en directo, sea un buen augurio para que transcurra por los cauces de la normalidad y el respeto a los que hacen música y pretenden vivir de ello.

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