Reportaje:MOTOCICLISMO | Pedrosa conquista en el Gran Premio de Australia su segunda corona de 250cc

Un hueso roto

El español revela que compitió lesionado

Sin apenas fuerzas para tenerse en pie ni contener las lágrimas, Dani Pedrosa se fundió en un abrazo con los miembros de su equipo cuando descabalgó de su moto. "A diferencia de otros, nosotros siempre hemos confiado en nuestras posibilidades", ironizó. "Sólo nosotros. Y eso dice mucho de lo que hay alrededor. Hemos apostado por nuestro triunfo", insistió, molesto por el trato que ha recibido últimamente, sobre todo por parte de algunos medios y rivales, que han dudado de sus posibilidades al tiempo que jaleaban a adversarios como Jorge Lorenzo.

Había quien se preguntaba si Pedrosa agua...

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Sin apenas fuerzas para tenerse en pie ni contener las lágrimas, Dani Pedrosa se fundió en un abrazo con los miembros de su equipo cuando descabalgó de su moto. "A diferencia de otros, nosotros siempre hemos confiado en nuestras posibilidades", ironizó. "Sólo nosotros. Y eso dice mucho de lo que hay alrededor. Hemos apostado por nuestro triunfo", insistió, molesto por el trato que ha recibido últimamente, sobre todo por parte de algunos medios y rivales, que han dudado de sus posibilidades al tiempo que jaleaban a adversarios como Jorge Lorenzo.

Había quien se preguntaba si Pedrosa aguantaría, mermado como estaba físicamente, la presión a la que le sometía Casey Stoner. Y Pedrosa respondió con un triunfo espectacular en casa de quien le disputaba el título. Dolorido en su hombro izquierdo, fruto de la triple caída que sufrió en Japón, un tanto mitigada por la fisioterapia y la rehabilitación a la que se sometió, Pedrosa reveló al término de la carrera: "Cuando llegamos a Malaisia, me sometí a una resonancia magnética que reveló la existencia de una fractura en la cabeza del húmero", afirmó, aliviado, el piloto, de 20 años, que, junto a su mánager, Alberto Puig, optó por no revelar el alcance real de la lesión hasta ayer. "Lo sabían pocas personas: mis médicos de Barcelona y un miembro del equipo. No queríamos asustar ni dar ventaja a los rivales", puntualizó; "tampoco lo dijimos por si los doctores del Mundial no nos dejaban correr".

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Presionado por Stoner, vencedor en las dos últimas citas, Pedrosa no quería dar síntomas de debilidad. "Correr con un hueso roto no es fácil porque no podía colocarse correctamente sobre la moto", subrayó Puig. "Intentó disimularlo incluso para no dar pistas", acabó; "lo que ha hecho tiene mucho mérito".

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