Los regantes de Murcia y Alicante reclamarán 38 hectómetros cúbicos más del trasvase del Tajo
El comité de crisis por la sequía formado en la Región de Murcia acordó ayer por unanimidad solicitar un trasvase del Tajo al Segura de 38 hectómetros cúbicos "a la mayor brevedad posible", con el fin de evitar la "muerte inminente" del campo, según indicó el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Francisco del Amor, quien calificó la situación de "desesperada".
A esta cantidad habría que añadir los 40 hectómetros cúbicos que previsiblemente solicitará la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, que se encarga de llevar el agua a los hogares de Murcia y...
El comité de crisis por la sequía formado en la Región de Murcia acordó ayer por unanimidad solicitar un trasvase del Tajo al Segura de 38 hectómetros cúbicos "a la mayor brevedad posible", con el fin de evitar la "muerte inminente" del campo, según indicó el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, Francisco del Amor, quien calificó la situación de "desesperada".
A esta cantidad habría que añadir los 40 hectómetros cúbicos que previsiblemente solicitará la Mancomunidad de los Canales del Taibilla, que se encarga de llevar el agua a los hogares de Murcia y el sur de Alicante, por lo que el trasvase sería de unos 78 hectómetros cúbicos, cuatro menos que el polémico envío aprobado el 1 de julio por el Consejo de Ministros.
En concreto, los regantes pedirán "el máximo autorizado" hasta el tope de agua de los pantanos de cabecera. Actualmente, Entrepeñas y Buendía poseen 318 hectómetros cúbicos, por lo que sólo se dejarían 240, lo que permite la resolución de la Comisión de Explotación del Acueducto que especificó que por encima de ese volumen "todo es trasvasable". La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró ayer el Gobierno decidirá el 30 de septiembre cuánta agua recibirá el sureste español, para que el agua llegue "cuanto antes a los regadíos murcianos".
Para agravar la crisis, los embalses de la cuenca del Segura, al 12% de su capacidad, poseen agua sólo para unos 11 días, según las previsiones realizadas por la Confederación Hidrográfica del Segura, que en las últimas jornadas ha reducido el caudal mínimo o ecológico, al tiempo que se vio obligada a dejar sin recursos durante unos días los arrozales de Calasparra. Así, tan sólo quedan unos 55 hectómetros cúbicos para el regadío tradicional, siendo 40 de ellos del denominado embalse muerto, que es la cantidad mínima que deben contener los pantanos, según aseguró recientemente el presidente de la Confederación Hidrográfica del Segura, José Salvador Fuentes Zorita. Las escorrentías aportan sólo 200.000 metros cúbicos al día, mientras que el consumo de la agricultura y el caudal mínimo gasta unos 900.000, lo que supone un gasto diario neto de unos 700.000. Sólo podrá paliar la situación la apertura de pozos de sequía, que añadirían cuatro millones de metros cúbicos al mes, insuficientes para salvar el campo.