Reportaje:MOTOCICLISMO | Gran Premio de Gran Bretaña

Simón se estrena a base de desparpajo

Primer triunfo del piloto toledano de 18 años descubierto por Alberto Puig

Es por todos sabido que la irrupción de la lluvia en los deportes de motor ofrece la posibilidad de tocar la gloria a pilotos normalmente ajenos a los tres anhelados escalones del podio. Ayer, en la menor de las categorías mundialistas, el héroe fue Julián Simón. Este piloto toledano de 18 años dio réplica a todos aquellos que han dudado de sus dotes para ponerse a los mandos de una KTM, una moto que por su potencial debe estar entre los puestos delanteros. Simón cosechó en Donington su primera victoria en el Campeonato del Mundo y, de paso, puso todo de su parte para que volviera a sonar el h...

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Es por todos sabido que la irrupción de la lluvia en los deportes de motor ofrece la posibilidad de tocar la gloria a pilotos normalmente ajenos a los tres anhelados escalones del podio. Ayer, en la menor de las categorías mundialistas, el héroe fue Julián Simón. Este piloto toledano de 18 años dio réplica a todos aquellos que han dudado de sus dotes para ponerse a los mandos de una KTM, una moto que por su potencial debe estar entre los puestos delanteros. Simón cosechó en Donington su primera victoria en el Campeonato del Mundo y, de paso, puso todo de su parte para que volviera a sonar el himno español al término de una carrera de 125cc.

La de Simón es la primera victoria de la categoría para un piloto español desde el cierre de la temporada pasada en Valencia, donde se impuso Héctor Barberá. Pero no fue suficiente porque el himno no sonó, según la organización, por una equivocación. El español venció en una carrera que será recordada por ser la primera en la que la norma flag to flag obliga a los pilotos a entrar en boxes para cambiar sus neumáticos por unos de lluvia. Simón venció en un alarde de valentía y desparpajo sobre una superficie que se cobró el concurso de 15 de los 41 pilotos que tomaron la salida. "Esto es como un sueño", declaraba el piloto de Villacañas con los ojos vidriosos. "He tenido que sufrir mucho para llegar hasta aquí". Nada acostumbrado al ritual que deben soportar los elegidos que se coronan ganadores, Simón se mostró cohibido y tímido ante el asedio al que se vio sometido tras la ceremonia del podio. "No he podido contener las lágrimas dentro del casco, lo que siento en estos momentos es muy intenso", afirmó el de KTM. Nada fácil lo ha tenido este piloto de semblante serio y cuya escalada melena negra le oculta el rostro. Ayer no se olvidó de lo mucho que ha sufrido antes del triunfo. "Quiero dar las gracias a todos los que tiran del carro conmigo y que siempre están ahí. Y a Alberto", dijo.

Al igual que pasó con Dani Pedrosa, Alberto Puig se fijó en él cuando tenía 14 años y le brindó la posibilidad de participar en el Campeonato de España para, en 2003, dar el salto al Mundial de 125cc con Malagutti. "La temporada siguiente pude tener una moto mejor, una Honda, y eso junto a la mediación de Alberto me abrió las puertas a KTM", certifica el toledano.

El inicio de la temporada fue convulso para él. La vigilia del día de Reyes, su ilusión por estar en uno de los mejores equipos del paddock se resquebrajó al fracturarse la clavícula derecha mientras practicaba motocross en Toledo. Más adelante, aún en pretemporada, sufrió dos caídas como consecuencia de la rotura del motor de su moto naranja. Sólo meses después de aquello, Simón es el único piloto que ha conseguido puntuar en las nueve carreras que se han disputado en una categoría en la que, en las últimas 47 carreras, no se ha repetido el vencedor. Regularidad a él, no le escasea. "Ahora estoy confiado y con la moral al máximo" concluyó. Ahora sólo espera que la presentación al mundo que tuvo ayer en Donington no sea fruto de un solo día.

Julián Simón, ganador de 125cc, por delante del francés Di Meglio.EFE

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